Durante la entrevista con Carlos Alsina, comenta la necesidad de hacer un congreso extraordinario en el Partido Popular de Madrid cuanto antes porque "no hay tiempo que perder". Además, cuenta que fue ella la que solicitó una reunión con Rajoy. De esa reunión, en la que vio al presidente "muy preocupado por el panorama actual de España", cuenta que Rajoy le comunicó que "no había ninguna decisión tomada sobre cuando deben celebrarse los congresos extraordinarios regionales". Por ello, se defiende, ante las informaciones publicadas en algunos medio de comunicación, asegurando que "en ningún momento he sido indisciplinada y lo que dije fue idéntico a lo que dijo el presidente balear José Ramón Bauzá". También niega haber mantenido sobre este asuntos alguna conversación con María Dolores de Cospedal y confiesa que no dimitió en 2012 porque la dirección central no quería que Ignacio González ocupase su puesto y le preocupaba que hubiese una "bicefalia".
Sobre la derrota electoral, Aguirre reconoce que es "responsable de todos mis errores y de la pérdida de apoyo de todos los ciudadanos". Por ello, afirma que ha barajado la posibilidad de dimitir, aunque deja claro que "hará los cuatro años de oposición, que como se ha demostrado es necesario". Además, advierte que "aunque Manuela Carmena diga que no es de Podemos, muchos de sus concejales sí que lo son e incitan al odio, como llevan tatuados en los nudillos algunos miembros del equipo de Ada Colau".
Aguirre acusa a Pedro Sánchez de "haber firmado un contrato de adhesión con Podemos" y recuerda que le ofreció al PSOE, que su candidato, Antonio Miguel Carmona, "fuera el alcalde con un programa apoyado por el Partido Popular, incluso con mi renuncia si fuera necesaria", algo que finalmente no se produjo porque prefirieron apoyar la candidatura que como dijo Pablo Igielsias es "el trampolín de Podemos en las generales".
Por todo ello, Aguirre lamenta el momento político que atraviesa España, que dice "es el más delicado desde la transición por la aparición de los populismos y la amenaza secesionista" y, ante esta situación, destaca la importancia de "ganar las elecciones generales" y cree que para lograrlo es necesario que "la gente se ilusione con nosotros". De cara a esos comicios, la todavía presidenta del PP madrileño considera que "Mariano Rajoy es el mejor candidato y que todos los miembros del partido tenemos que apoyarle". Asimismo, insiste en que en caso de que Podemos resulte ganador de las próximas elecciones, "no volveremos a votar libremente".
También, se muestra partidaria de reformar la ley electoral, en la que exista "una segunda vuelta", ya que a su juicio "lo demandan los ciudadanos y es uno de los motivos de la la desafección de los ciudadanos".
