Alfredo Martínez

En los últimos tiempos, la Real Sociedad que ha armado Imanol Alguacil se ha convertido en uno de los equipos más difíciles del campeonato y que mejor fútbol práctica. Tiene un muy buen gusto por el trato del balón y prefiere ser protagonista jugando bien al fútbol y plantando cara al rival en su propio campo. No hace falta retrasarse mucho tiempo para recordar la crisis que abrió la Real al vencer en Anoeta el primer partido de enero con Messi en el banquillo.

Hasta siete jugadores ha llegado a tener en la enfermería el Barcelona en las últimas semanas.

Aitana Bonmati sustituyó a la otra Reina del fútbol Alexia Putellas y mantiene al Barcelona como el auténtico el Rey del fútbol femenino moderno.

El clásico nos dejó una impactante irrupción de Jude Bellingham en el estadio olímpico en la segunda parte cuando tanto él como su equipo habían sido sometidos por Gavi y el Barcelona respectivamente.

Primer Gran clásico de la liga que se disputará en el destierro del estadio olímpico de Montjuic, con todo lo que va a significar. El Barcelona perderá buena parte del empuje de un estadio enfervorizado y con más de 95.000 almas para jugar en un recinto con pista de atletismo y con apenas 50.000 personas sin embargo, estos partidos son especiales y el público se vuelca desde el primer minuto.

Es más, los aficionados que acuden desde el comienzo de temporada a la montaña olímpica se están mostrando como una auténtica garganta, animando constantemente y empujando el equipo con mucho más fervor que el que se solía hacer tradicionalmente en el Camp Nou.

No es nada habitual ni fácil en el fútbol moderno recurrir permanentemente al equipo filial para completar la plantilla y sobre todo para tener minutos de calidad en el arranque de la temporada.