Alfredo Martínez

Estamos a punto de terminar el mercado veraniego y todavía continúa el culebrón de la salida del centrocampista holandés Frankie de Jong del Barcelona. Llevamos casi mes y medio con una historia que parece interminable.

Como viene siendo habitual, este ha vuelto a ser un verano muy movido en el fútbol club Barcelona. La delicadísima situación económica ha obligado a tomar medidas drásticas a la actual directiva que han provocado la venta de un importante patrimonio por un importe superior a los 700 millones de euros.

Una de las primeras consecuencias de las obras de remodelación del vetusto Camp Nou será la obligación de trasladarse temporalmente durante una temporada a disputar los partidos oficiales al Estadio Olímpico de Montjuïc.

El fin de semana polideportivo nos trajo muchos acontecimientos y partidos de máxima importancia en casi todas las disciplinas.

Una vez aprobadas las ventas de derechos televisivos y de la mitad prácticamente del Merchandaising da la sensación de que el Barcelona aparca momentáneamente, el tema económico ingresando importantes cantidades y puede empezar a acometer la importante restructuración deportiva e inversión en fichajes para este verano.

En realidad a la asamblea de compromisario no le quedaba otra ante esta difícil tesitura económica el club tiene que tirar hacia delante y puede ser que esta hipoteca de ingresos sea la solución menos mala de cara al futuro.

Se confirmó lo que era un secreto a voces, que Dani Alves no va a continuar en el Barcelona la próxima temporada. A pesar de su enorme carisma y su de su gran personalidad y de ser una adquisición barata con una ficha baja, el Barcelona entiende y creo que con buen criterio, que debe empezar a mirar hacia el futuro.