Ángel Martínez Bermejo

Gaziantep no es de las ciudades más conocidas de Turquía, sin embargo, es un lugar estupendo para comenzar un viaje por el Sur de Turquía. Gaziantep tiene de todo: monumentos, uno de los mejores museos del país y un ambiente callejero de bazares de lo más entretenido y disfrutón. Gaziantep invita a perderse entre sus calles durante horas, sin cansarse porque todo son estímulos visuales, sonoros y olfativos.

Si hiciéramos una lista de los lugares más enigmáticos del mundo probablemente todos incluiríamos a la Isla de Pascua, Rapa Nui, entre los primeros puestos. Su lejanía de cualquier continente o de cualquier otra isla, casi perdida en medio del Pacífico, y los moáis, esas extraordinarias estatuas que tanto nos impresionan, son ingredientes más que suficientes para imbuirla con ese punto de intriga y misterio que resulta tan atractivo a muchos viajeros.

El gran recinto arqueológico de Persépolis es una de las glorias del antiguo imperio aqueménida. Sin duda, es uno de los destinos fundamentales de cualquier viajero que recorra Irán, pero sobre todo es uno de esos lugares míticos que sueñan conocer todos los aficionados a la Historia.

En el sureste de Turquía, en la Alta Mesopotamia, se encuentra Gobekli Tepe, el santuario más antiguo del mundo. Es un recinto arqueológico cuya antigüedad se hunde en el fondo del tiempo. Proponemos una ruta para conocer qué se siente al viajar por uno de los lugares que se pueden definir como la cuna de la civilización.

Albania es uno de los países menos conocidos por los viajeros en toda Europa, y no es por falta de atractivos. La razón hay que buscarla en las décadas de aislamiento durante las cuales el turismo no estaba prohibido pero ciertamente sí muy restringido. En lo que llevamos de siglo el país vive un verdadero boom turístico y todo el mundo viene atraído por la belleza de la costa y de las montañas, una historia milenaria que ha dejado un patrimonio muy importante, con cuatro lugares inscritos en la lista del patrimonio mundial de la Unesco y con algunos otros esperando su turno. Un país mediterráneo tiene siempre belleza, patrimonio y un estilo de vida que nos resulta muy atractivo. Si a eso le añadimos unos precios más comedidos que en otros países cercanos tenemos un destino excelente para unas vacaciones.

Cuando pensamos en un viaje relacionado con la naturaleza, Costa Rica es uno de los nombres que aparecen en nuestra lista de posibles destinos. A pesar de su extensión tan reducida guarda infinidad de tesoros muy variados que merecen ser conocidos.