Fernando Ónega

Quiero recordar a Juan Morano, que llegó a ser tertuliano con Luis del Olmo, hace ya unos cuantos años. Y hasta me apetece dirigirle esta carta, aunque no la pueda escuchar.

Buenas noches a Coqui, un gato de Lérez, en la provincia de Pontevedra. La gente se preguntará, querido Coqui, por qué le escribo a un gato, habiendo como hay tantos humanos que son noticia, desde Felipe VI a Puigdemont. Pero es que no conocen tu historia.

Buenas noches a Coqui, un gato de Lérez, en la provincia de Pontevedra. La gente se preguntará, querido Coqui, por qué le escribo a un gato, habiendo como hay tantos humanos que son noticia, desde Felipe VI a Puigdemont. Pero es que no conocen tu historia.

La política española, es decir, el Estado, y todos nosotros, hemos vivido y seguimos viviendo pendientes de ti. Pendientes de un calendario, como si nos fuese la vida en ello. La vida en ti. Está mirando el calendario Su Majestad el Rey, que mañana dirá su mensaje de Navidad y lo estuvo redactando y cambiando a medida que pasaban y cambiaban las hojas de su agenda, suponiendo que el Rey utilice agenda de papel.

La política española, es decir, el Estado, y todos nosotros, hemos vivido y seguimos viviendo pendientes de ti. Pendientes de un calendario, como si nos fuese la vida en ello. La vida en ti. Está mirando el calendario Su Majestad el Rey, que mañana dirá su mensaje de Navidad y lo estuvo redactando y cambiando a medida que pasaban y cambiaban las hojas de su agenda, suponiendo que el Rey utilice agenda de papel.

Esa cuestión, casi más ética que política, debe de ser la que le quita el sueño a Pedro Sánchez y a todo el PSOE, que ante esto también tiene dos almas.