Fernando Ónega

Pues francamente, perdón, sinceramente: claro, lo que se dice claro, no me ha quedado, y bien que lo siento. Lo siento, porque el PSOE es el partido con más capacidad para estructurar España por su presencia en todas las comunidades, pero su líder parece metido en un carajal mental importante.

La evolución de los hechos indica que a Sánchez no le quedó otro remedio. El candidato Sánchez intentó escaquearse, porque ahora anda en otro discurso: anda en el discurso del nacionalismo español y juega a ser el dique de los demás nacionalismos. Sobre todo, del catalán.

La evolución de los hechos indica que a Sánchez no le quedó otro remedio. El candidato Sánchez intentó escaquearse, porque ahora anda en otro discurso: anda en el discurso del nacionalismo español y juega a ser el dique de los demás nacionalismos. Sobre todo, del catalán.

Yo, sinceramente, no tengo cultura ni cultureta demoscópica bastante para ese dictamen. En principio, un barómetro de 17.000 entrevistas presenciales ofrece muchas garantías de solvencia; muchas más no puede ofrecer. En contra de esa tesis está la cocina, de donde pueden salir platos escorados hacia la derecha o hacia la izquierda.

Yo, sinceramente, no tengo cultura ni cultureta demoscópica bastante para ese dictamen. En principio, un barómetro de 17.000 entrevistas presenciales ofrece muchas garantías de solvencia; muchas más no puede ofrecer. En contra de esa tesis está la cocina, de donde pueden salir platos escorados hacia la derecha o hacia la izquierda.

Para un partido que se define de centro en España, no será este cronista quien escriba su necrológica anticipada, por mucho que las encuestas vaticinen su defunción. Vamos a esperar, por lo menos, el dictamen del CIS esta mañana y vamos a esperar, sobre todo, lo que dice la encuesta auténtica del 11 de noviembre. Pero eso no me impide reconocer que Ciudadanos pasa la peor crisis de imagen de toda su Historia.