El líder socialista asume discretamente que haya Ley de Amnistía
El líder socialista más crítico -el único en realidad- dentro del PSOE, vuelve por sus fueros y cree que el gobierno está siendo humillado y puesto en ridículo por Carles Puigdemont. Pero con una frase breve asume que se apruebe la Ley de Amnistía... para que su partido no quede en ridículo.
Objetivo: convertir la amnistía de imposible a impecable
"Tiempo hay, lo que no sabemos es de qué podemos hablar. Estamos al límite. No queda margen constitucional". Con estas palabras autorizadas cercanas a la dirección del PSOE, advierten a Junts de que la Ley de Amnistía debe quedar como está. Pero Puigdemont quiere más. Se ve en peligro real.
Sánchez olvida la Amnistía y anuncia un plan de refuerzo en Lengua y Matemáticas
Con la esperanza puesta en un nuevo milagro electoral, los socialistas cierran su doblete en A Coruña: Convención política y Comité Federal. Objetivos: menos críticos en la dirección del partido y llegar a tierra firme en las próximas elecciones gallegas. De la Amnistía, ni palabra.
El gobierno defiende a la ministra Ribera que acusa de parcial al juez García Castellón
"El respeto (a los jueces) prevalece por encima de todo, pero la vicepresidenta (Teresa Ribera) intentó trasladar la misma posición que el gobierno". Con estas palabras, la portavoz Pilar Alegría deja claro que apoya lo dicho por su ministra que criticaba ayer al juez que sigue la causa por terrorismo de Carles Puigdemont.
Convención Política y Comité Federal en A Coruña
La Convención política y el Comité Federal de A Coruña quieren sacar del foco las relaciones peligrosas del partido con Junts per Cataluña para "centrarse en lo importante": sacar adelante la legislatura y unos buenos resultados en las próximas elecciones gallegas. Y de paso colocar en la dirección del partido a más ministros que blinden a Sánchez en el PSOE. Ya hay nombres, todos ministros. De García Page y de Puigdemont, nadie quiere hablar en Ferraz.
Crítica feroz del socialista manchego contra Sánchez
"Lo que están planteando es que el gobierno gobierne con camisa de fuerza". Con esta frase define la situación actual el presidente castellano-manchego, Emiliano García Page, que vuelve por sus fueros contra el gobierno de Pedro Sánchez.
