Aquilani, de 33 años, llega a Gran Canaria siguiendo la recomendación de su amigo Kevin-Prince Boateng, exjugador del equipo amarillo, quien le dijo que era un sitio "increíble para jugar y vivir", aunque el alemán decidiera marcharse a pocos días del comienzo de la temporada por problemas familiares. El internacional italiano en todas las categorías -38 ocasiones con la selección absoluta- jugó la pasada temporada en el Pescara y en el Sassuolo, y asegura estar "bien" físicamente, aunque reconoce que ha estado entrenándose en solitario durante dos meses "y no es lo mismo que hacerlo con el equipo".
El nuevo futbolista del conjunto grancanario, ayudado de traductor, ha dicho que tenía ofertas de otros equipos, pero ha agradecido la recomendación de Prince Boateng y, además, le seducía jugar en España: "Siempre quise jugar en LaLiga y tengo ganas de iniciar esta nueva aventura", ha declarado. Aquilani asegura que puede jugar "en cualquier posición" del centro del campo, y no solo puede ayudar con su experiencia, sino que pueda aportar desde los aspectos "físico, técnico y mental", después de haber pasado por otras ligas europeas como la italiana, inglesa o portuguesa.
El italiano, quien llevará el dorsal 25, ha restado importancia a la derrota del pasado sábado ante el Atlético de Madrid (1-5), que presenció en el Estadio de Gran Canaria, porque a su juicio era un "partido complicado" ante un rival "muy difícil", y ha destacado de su nuevo equipo que es "fuerte técnicamente", por lo que se puede adaptar a esa "filosofía de juego". Por su parte, Toni Cruz, director deportivo de la UD Las Palmas, ha dicho que Aquilani es un jugador de "máximo nivel y muchísima calidad", que va a aportar "experiencia", que ha ido "retrasando su posición" en las últimas temporadas, y que llega para ayudar al "eje" del centro del campo, una posición en la que habían "bajado mucho la media de edad" con los actuales jugadores.
Además, el dirigente ha reconocido que es "posible" que el fichaje del internacional italiano no sea el último antes del cierre del mercado, ya que el club aún tiene una ficha disponible con el dorsal 7 que dejó vacante Prince Boateng. Por otra parte, queda pendiente también en la Unión Deportiva encontrarle destino al delantero murciano Alfredo Ortuño, con el que no cuentan, y cuyo objetivo es recalar en un equipo de Primera antes del cierre del plazo de incorporaciones.