Australia ha eliminado a Argentina de la Copa del Mundo, tras derrotar a los Pumas por 15-29. Adam Ashley-Cooper ha sido el mejor del partido, anotando tres ensayos, siendo el líder de los suyos.
Después de una gran fase de grupos y de un contundente triunfo sobre Irlanda en los cuartos de final (20-43), Argentina se enfrentaba en Twickenham con unos Wallabies invictos y con las miras puestas en llegar a su cuarta final de Mundial, pero deberán esperar hasta el siguiente campeonato.
Tras una gran fase de grupos y un contundente triunfo sobre Irlanda en cuartos de final (20-43), Argentina se enfrentaba en Twickenham con unos Wallabies invictos en el torneo y que tenían el objetivo de llegar a su cuarta final de un Mundial. En un estadio dividido, y bajo la atenta mirada de Diego Armando Maradona, que cumplió su promesa y presenció en directo el duelo, los Pumas empezaron nerviosos y al primer minuto ya habían encajado el primer ensayo. Australia presionaba muy arriba y forzó un error de Nico Sánchez, excelso durante todo el torneo, cuyo pase lo interceptó Rob Simmons para apoyar fácil el oval junto a la hache.
Bernard Foley convirtió y los Wallabies se pusieron rápidamente siete arriba (0-7, m.2). Descontaron los de Daniel Hourcade gracias a un penalti de su apertura a los seis minutos, pero poco después Adam Ashley-Cooper anotó un nuevo 'try' para ampliar la ventaja de los oceánicos tras una nueva desconcentración defensiva. Los de Michael Cheika jugaron bien el 'scrum' y consiguieron encontrar por la derecha a Ashley-Cooper, que voló para apoyar la pelota (3-14, m.10).
Los Wallabies, apoyados en los magistrales David Pocock e Israel Folau, quienes no estuvieron en el choque de cuartos ante Escocia, apenas daban opciones a unos Pumas a los que el encuentro se les puso un poco más cuesta arriba después de que el árbitro amonestara a Tomás Lavanini por un 'tackle' sin los brazos.
Además, primero Juan Imhoff y más tarde Agustín Creevy tuvieron que abandonar el terreno de juego por lesión. Se le complicaba todavía más el partido a una albiceleste que veía cómo Ashley-Cooper volvía a apoyar el oval en la esquina, ampliando todavía más la ventaja 'aussie' (6-19, m.32). Al filo del descanso, y tras una primera parte poco brillante de los argentinos, Nico Sánchez, gracias a un nuevo golpe de castigo, descontaba hasta los diez puntos (9-19, m.36).
La segunda mitad, pese a que comenzó con penalti errado por Foley a los 30 segundos, fue otra historia, y los Pumas, sin Juan Martín Hernández, pero con Tomás Cubelli y Facundo Isa, se fueron a por el triunfo. Redujo diferencias Sánchez con un golpe de castigo impecable, y ahí el partido se cerró mucho más, con ambos conjuntos cometiendo muchas imprecisiones. A falta de ocho minutos para la conclusión los Wallabies finiquitaron la semifinal con un nuevo ensayo, obra de Ashley-Cooper, que conseguía su tercer 'try' de la tarde. Mitchell se fue hacia el centro, habilitó al ala y éste apoyó para anotar su 'hat-trick'.
La conversión de Foley amplió la ventaja australiana hasta los 14 puntos (15-29, m.72), una diferencia casi insalvable. Pese a que los Pumas se fueron al ataque, los Wallabies se llevaron un triunfo que les sitúa en su cuarta final de Copa del Mundo, en la que lucharán por su tercer entorchado frente a unos All Blacks que el sábado se deshicieron de Sudáfrica (18-20) y que también aspiran a su tercera corona mundial. Por su parte, los hombres de Hourcade, después de un excelente torneo, se quedan, al igual que sucedió en Francia 2007, a un paso de la final y lucharán el próximo viernes por la tercera plaza ante los Springboks.