"Debo ir a cumplir mi sueño. Llevo una vida esperando concretarlo", así se despedía Facundo Campazzo del Real Madrid hace 2 años. Fue en el mes de noviembre del 2020 y el base argentino ha apurado sus opciones hasta última hora para seguir cumpliendo su sueño.
Sin equipo desde que Denver Nuggets prescindiera de sus servicios, sus representantes han estado agitando el árbol de la NBA hasta conseguir que un viejo amigo, Luka Doncic, ha ejercido de "cicerone" en Dallas logrando que Campazzo persista en su empeño de jugar en la mejor liga del mundo del baloncesto.
Al límite
La situación era crítica para Campazzo, a siete días vista del inicio de la temporada en la NBA y con las ligas europeas en marcha, se debatía entre seguir soñando o despertar de golpe regresando a Europa y al Real Madrid. El equipo blanco, viendo que el tiempo se agotaba para el argentino, había llamado a su puerta hace unas semanas proponiendo la reactivación de su contrato: 3 años de duración y en torno a 3 millones de euros por temporada.
El montante que aún debe pagar Campazzo al Madrid por su salida a la NBA, algo más de 2 millones de euros, ni se mencionaba. La respuesta de Campazzo y sus representantes fue un no tajante. Sin espacio para la negociación, ambas partes se mantenían firmes en sus convicciones: Campazzo buscando su sitio en la NBA y el Madrid mostrando la paciencia de quien tiene su planificación hecha. Entre medias, falsos rumores que situaban al argentino en Belgrado o en Estambul. Ni el Partizán ni el Fenerbahce han sido, en realidad, opciones para Campazzo.
Su mente se debatía entre el regreso al Real Madrid o apurar su tiempo en la NBA al máximo. Y en ese lapso, una rendija se abría con Dallas Mavericks y su entrenador Jason Kidd buscando un director de juego que completara su plantilla. Barajados varios nombres, la ascendencia de Luka Doncic en la franquicia y su buena relación con Campazzo han decantado la balanza.
El dinero es lo de menos
¿Por qué acepta un contrato de menor cuantía económica? Facundo Campazzo no se guía por el dinero. Alguno podría pensar de él que un insensato: teniendo que pagar más de 2 millones de euros al Real Madrid (apenas llegará a los 2 millones de dólares esta temporada), tendrá un rol menor y con enorme competencia en su puesto.
Pocos minutos, a priori, y menos dinero, ¿entonces? Confía en su trabajo, en su talento y en sus posibilidades para ganarse un sitio en Dallas y un mejor contrato al finalizar la temporada. Si la jugada no le sale bien, siempre tiene las puertas abiertas del Real Madrid y del baloncesto europeo.
Hay un segundo aspecto que también ha influido en su decisión, aconsejado en este caso por sus representantes y asesores legales, y es que con la firma del contrato con Dallas se asegura poder percibir la pensión vitalicia que la NBA ofrece a aquellos jugadores que han estado, al menos, tres temporadas en la Liga. Además la NBA ofrece a quien acceda a su sistema de pensiones un seguro de salud vitalicio, aspecto para nada menor en un país como Estados Unidos, y por otro lado, el sistema de pensiones de la NBA también ofrece ayudas para planes de educación y estudios, con los que los jugadores retirados puedan acceder o completar la educación que en su día detuvieron.
Aspectos secundarios pero que han decantado la balanza a favor de la NBA, de Dallas y de Luka Doncic. El Real Madrid anhelaba el regreso de Campazzo pero la decisión final dependía única y exclusivamente del argentino. Y Campazzo ha decidido seguir cumpliendo su sueño e intentar completarlo.
