El año no ha empezado bien para los Timberwolves de Ricky Rubio. En su primer partido de 2017, sufrieron la cólera de un CJ McCollum que hizo su máxima anotación personal en la NBA, anotando 43 puntos en una serie de tiro espléndida.
16 tiros de los 25 que intentó acabaron dentro del aro, empezando el partido con 13 puntos y un 5 de 6 en tiros de campo. A partir de ahí, los Timberwolves reaccionaron, ganando el segundo cuarto por un parcial de 26-13 y estando 12 arriba en el marcador al descanso.
Un punto para Ricky
Pero tras el parón, McCollum volvió a salirse en el tiro, estando prácticamente infalible en los dos últimos cuartos y acabando con su máximo personal desde que está en la NBA.
El que no tuvo su noche fue Ricky Rubio, que sumó un punto de un tiro libre y ahí se quedó su aportación. El de El Masnou también sumó seis asistencias, pero fue insuficiente para su equipo.