Shane Larkin, jugador estadounidense del Anadolu Efes, batió este viernes el récord histórico de anotación en un partido de Euroliga gracias a los 49 puntos que logró en el triunfo frente al Bayern Múnich (104-75) en el que, además, igualo con diez triples la mejor marca de la competición.
Hasta hoy, cuatro jugadores compartían el récord anotador con 41 puntos: Alphonso Ford (Peristeri), Carlton Myers (Fortitudo Bologna), Kaspars Kambala (Efes Pilsen) y Bobby Brown (Montepaschi Siena). Los dos primeros lo consiguieron en 2001, el tercero un año después y Brown les igualó en 2013.
"Realmente no sé qué decir en este momento. Esta noche fue una de esas noches en la que haces el primer par de tiros y el aro te parece un océano. Estoy realmente agradecido por este momento. Esto es realmente una bendición, seguro", dijo Larkin tras el partido disputado en el Sinan Erdem Dome de Estambul.
"Hemos estado trabajando realmente duro como equipo cada día en los entrenamientos", añadió el director de juego, que destacó como ha mejorado su baloncesto gracias a la ayuda de unos compañeros "que hicieron un gran trabajo para motivarme en los entrenamientos y a los entrenadores que me mantuvieron alejado de las lesiones".
En los 31 minutos que estuvo en pista, el estadounidense anotó cinco de sus siete lanzamientos de dos puntos, diez de sus trece intentos triples y nueve tiros libres de los diez que dispuso. Además, capturó dos rebotes defensivos, entregó cinco asistencias, robó un balón y forzó seis faltas personales, lo que se tradujo en una valoración final de 53 tantos, la quinta mejor de la historia de la Euroliga.
Antes de que empezase el último cuarto, ya había anotado 36 puntos y cuando logró batir el récord anotador, a 2:13 del final, señaló al cielo como señal de agradecimiento. Después sumó otros dos triples con los que igualó la mejor marca de la historia de la máxima competición continental desde el perímetro.