SE LE IMPUTAN 144 CARGOS DE ABUSO SEXUAL

Condenan a 23 años de cárcel a un entrenador sudafricano de waterpolo por abusos a menores

La Justicia sudafricana condena a una pena de 23 años de prisión a Collan Rex, un exentrenador auxiliar de waterpolo de un colegio de educación secundaria. Rex admitió haber abusado de más de una decena de menores que tenían entre 13 y 16 años.

ondacero.es

Madrid |

Vista de una piscina olímpica | Getty Images

La Justicia sudafricana dictó una pena de 23 años de cárcel para un antiguo entrenador auxiliar de waterpolo de un colegio de educación secundaria que admitió haber abusado de 17 menores.

Collan Rex, que ejerció como entrenador en la Escuela de Secundaria de Niños de Parktown (una de las más antiguas de Johannesburgo) fue condenado a 20 años de prisión por los 144 cargos de abuso sexual que se le imputaban. Rex, de 23 años, recibió tres años adicionales de prisión por 12 delitos de agresión.

Los menores de los que abusó el acusado tenían entre 13 y 16 años de edad. "Según los hechos, no puede usted ser descrito más que como un delincuente sexual en serie y un abusador sexual", afirmó el magistrado Peet Johnson al leer la sentencia, según recogió el portal informativo News 24.

Inicialmente, estaba imputado por más de 300 cargos de abuso pero, tras declararse voluntariamente culpable de 144, la corte aceptó reducir las acusaciones. El proceso tuvo lugar en un juzgado de la provincia de Gauteng (centro) y la Fiscalía, entre sus razonamientos, recordó que algunas de las víctimas de Rex están ahora en tratamiento psiquiátrico.

Para la acusación pública, el instructor de waterpolo actuó de forma premeditada, inhumana, controladora y sin misericordia. La defensa, por su parte, quiso atenuar la sentencia con argumentos como que el acusado no buscaba hacer daño a sus víctimas y que había crecido en un entorno que alentaba la cultura del "comportamiento sexual inapropiado" entre entrenadores y aprendices.

El acusado fue pillado por una cámara de seguridad en unas imágenes donde se le veía tocando a uno de los menores, de 15 años, en noviembre de 2016.