El exjugador argentino Diego Armando Maradona tuvo que ser trasladado al hospital por una indisposición tras el encuentro entre Nigeria y Argentina (1-2) en el Estadio Krestovski de San Petersburgo, que supuso la clasificación de la albiceleste para los octavos de final del Mundial de Rusia, según informa ESPN.
Las imágenes de televisión y vídeos grabados por particulares mostraron a un 'Pelusa' en aparente estado de embriaguez, exaltado con los dos goles argentinos, el segundo de los cuales celebró haciendo un par de peinetas y gritando improperios.
El histórico '10' de la albiceleste festejó con entusiasmo los tantos de Leo Messi y Marcos Rojo y tuvo que ser sujetado incluso para evitar que se precipitara desde el palco desde donde vio el partido.
Tras el duelo, tuvo que ser ayudado para abandonar la grada y entrar en una sala, donde fue atendido por personal del estadio. Desde allí se decidió enviarle a un hospital de la ciudad para un examen más exhaustivo.