Un escalador británico ha fallecido en el Monte Everest este sábado, elevando el número de muertos en esta temporada en el pico más alto del mundo a 10, confirmaron las autoridades de Nepal.
Robin Haynes Fisher, de 44 años, murió la madrugada del sábado a 8.700 metros después de regresar de la cima, dijo Murari Sharma de la organizadora de expediciones Everest Pariwar Treks en Katmandú.
"Había descendido unos 150 metros por debajo de la cima cuando se derrumbó de repente. Su guía sherpa intentó rescatarlo, pero ya había muerto", dijo Sharma.
El viernes, el irlandés Kevin Hynes, de 56 años, murió en su tienda de campaña a 7.000 metros después de regresar de la cumbre, dijo en un comunicado 360 Expeditions, empresa de escalada con sede en el Reino Unido.
Ese mismo día, la guía nepalí Dhurba Bista, de 33 años, murió en el campamento base tras ser trasladada en avión desde un campamento más alto por enfermedad, según su empleador, Anil Bhattarai, de Himalayan Ecstasy Treks.
Tres indios, dos mujeres y un hombre, murieron esta semana durante su descenso después de escalar el pico, mientras cientos de escaladores presionaban por subir al pico más alto del mundo aprovechando la ventana de buen tiempo.
A principios de este mes, un escalador estadounidense y un escalador indio también murieron durante su descenso del Everest.
Un escalador austriaco murió en el lado tibetano del pico de 8.848 metros. Seamus Lawless, otro escalador irlandés que desapareció el 16 de mayo, se presume muerto en la montaña.
Babu Sherpa, director de Peak Promotion, dijo que el hacinamiento había congestionado la ruta desde el Campamento IV hasta la cima.
"Solo había ventanas -de clima- cortas y todos intentaban escalar a la vez", dijo. Cientos de escaladores intentan escalar el Monte Everest y otros picos del Himalaya durante la temporada de escalada de primavera. Cinco alpinistas murieron en el Everest el año pasado.