El futbolista ha señalado que se sintió mal, por lo que tuvo que ser asistido en el vestuario por los médicos, que le han dicho que sufrió un golpe de calor.
Cuestionado al respecto, Álvaro ha indicado que "jugar con este calor es inhumano", en alusión a la temperatura del encuentro que, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) era de 28 grados y un 73 por ciento de humedad a las 16.15, hora del inicio del choque.
"Sobre todo en la primera parte fuera muy complicado jugar", agregó Álvaro, quien agregó que sería bueno cambiar "este tipo de horarios", algo que curiosamente no sabe si "se podrá hacer el próximo fin de semana", en el que el Villarreal juega a la misma hora con el Valladolid también el La cerámica.