El Real Madrid ha comunicado hoy el positivo en COVID de Sergio Ramos, aunque el camero ya estaba de baja por lesión y por tanto apenas había estado en contacto con sus compañeros ni había viajado a Liverpool para el partido de Liga de Campeones. Por este mismo motivo también está ausente del equipo el otro central titular, Varane.
Pese a estar lesionado, si pudimos ver a Sergio Ramos el pasado sábado en el Alfredo Di Stéfano, donde se mostró muy activo en la grada durante el Clásico ante el Barcelona. El sevillano incluso bajo al túnel de vestuarios al término del partido para mediar en las quejas blaugranas contra el colegiado del encuentro.
Este positivo de Ramos es un nuevo varapalo para el central madridista que verá retrasada su vuelta a los terrenos de juego. El sevillano tendrá que permanecer ahora aislado y aunque en el mejor de los casos pase la enfermedad sin ningún síntoma importante habrá que ver cómo afecta esto a la recuperación de su lesión.
Una temporada marcada por las lesiones
Hasta el momento, Sergio Ramos sólo ha podido jugar esta temporada 20 partidos con el Real Madrid. Una cifra que llama la atención si tenemos en cuenta que el pasado curso disputó hasta 44, perdiéndose sólo dos por problemas físicos… y cuatro por estar sancionado.
Ya en el mes de octubre comenzaron sus problemas con la rodilla izquierda, una lesión que ha arrastrado durante todo este tiempo y que le llevó a tener que pasar por el quirófano en el mes de febrero. Entre medias, Ramos también ha tenido que convivir con lesiones musculares como la que sufrió en el mes de noviembre en el bíceps femoral de su pierna derecha jugando con la selección ante Alemania.
Precisamente fue con el combinado nacional, y nada más recuperarse de su operación de rodilla, cuando Ramos sufrió la lesión que ahora mismo le tiene de baja. En plena carrera por su record de internacionalidades, el sevillano forzó para jugar unos minutos ante Kosovo a finales de marzo. El resultado, una lesión en el gemelo que le iba a tener un mes sin jugar… un plazo que podría ahora ampliarse con este positivo en COVID.
Su futuro es toda una incógnita
Todos estos problemas le han llegado a Sergio Ramos en un año que debía ser decisivo para su futuro. El defensa acaba contrato el próximo mes de junio y su renovación con el Real Madrid se ha convertido en todo un culebrón. La postura del club es firme y dada la edad del sevillano (35 años) sólo le ofrece un año de contrato, además de una rebaja salarial.
Ramos no quiere aceptar estas condiciones y se plantea un futuro lejos de la casa blanca. Los grandes de Europa han mostrado interés en su fichaje, pero la crisis económica que vive el mundo del fútbol hace difícil que alguien le pague lo que pide. Su continuidad o no en el Real Madrid sigue en el aire… pero de momento, este 2021 es, para Sergio Ramos, un año para olvidar.