El técnico del Arsenal FC, Arsene Wenger, ha sido sancionado con cuatro partidos y una multa de unos 30.000 euros por su mala conducta en el partido contra el Burnley el pasado 22 de enero, donde insultó al cuarto árbitro en el minuto 92 y propició el "contacto físico" entre ambos, según ha dicho la Asociación de Fútbol de Inglaterra (FA).
Los hechos tuvieron lugar en el Emirates Stadium, en el partido de Premier League que enfrentaba al Arsenal y al Burnley. El entrenador 'gunner' protestó un penalti de Francis Coquelin a Ashley Barnes al colegiado, tras lo cual fue expulsado.
Según la propia FA, el motivo de la sanción, que le mantendrá cuatro partidos alejado de los banquillos, es que Wenger usó "palabras ofensivas e insultantes" contra el cuarto árbitro. Todo ello, sumado a que propició el "contacto físico" con el mismo, supone para el organismo futbolístico una "conducta impropia".
El entrenador del equipo londinense, que tendrá que pagar una multa de alrededor de 30.000 euros, admitió el cargo y solicitó una vista personal ante la Comisión Regulatoria Independiente.