El Real Madrid completó su tercer entrenamiento de la semana para preparar el choque ante el Granada y lo hizo sin el portugués Pepe y el galés Gareth Bale, que a dos días del partido frente al conjunto andaluz se entrenaron al margen del grupo por culpa de sus respectivas lesiones. Ambos continuaron con sus procesos de recuperación y, salvo sorpresa, parece que no podrán viajar hasta la ciudad andaluza para jugar contra los hombres de José Ramón Sandoval.
Pepe, con una dolencia en la fascia plantar que le impidió entrar en la convocatoria del partido que ganó el Real Madrid al Espanyol el pasado fin de semana, no trabajó a las órdenes de su técnico, que aún parece que tendrá que esperar un poco más para recuperar a su otro lesionado. Bale, que se lesionó un gemelo el pasado 18 de enero durante el choque que disputó su equipo frente al Sporting, parece que tendrá que esperar otra más para reaparecer ante el Athletic el siguiente fin de semana.
Si nada cambia en dos días, los dos serán las únicas ausencias que tendrá Zinedine Zidane, que dirigió una sesión en la que el balón volvió a ser el protagonista del entrenamiento. Además, el jugador de la cantera, Mariano, trabajó junto a la primera plantilla en un día que comenzó con trabajo físico sobre el césped, continuó con ejercicios de posesión de balón y, una vez más, el técnico francés incidió en la presión y en los remates a portería.