El Villarreal CF recuperó el pulso en la Europa League tras derrotar (1-0) al Viktoria Plzen, el campeón de la República Checa, gracias a un sensacional gol de Leo Baptistao al poco de comenzar la segunda mitad, en un partido perteneciente a la segunda jornada de la fase de grupos.
El equipo de Marcelino García Toral, líder de la Liga BBVA, recobró el camino correcto en el 'Viejo Continente' tras su derrota de la primera jornada ante el Rapid. Los 'amarillos' vencieron por la mínima, pero sumaron los tres puntos que le permiten meterse de lleno en la pelea por acceder a los dieciseisavos de final.
Están de dulce
El cuadro castellonense dio continuidad al dulce momento que vive en Liga y doblegó a los checos sin grandes alardes. Así como los 20 minutos finales sí fueron reflejo del habitual Villarreal, el resto del partido distó mucho de la idea que Marcelino quiere para su 'Submarino Amarillo'. Aún así, entre Soldado y Jonathan pudieron haber marcado mucho antes.
El ex del Real Madrid, con un cabezazo tremendo, estuvo a punto de marcar el 1-0 a los 19 minutos. Un centro impecable de Jaume Costa que no encontró correspondencia dentro del área fue la primera gran oportunidad de los locales, que siguieron intentándolo sin suerte hasta alcanzar el descanso.
Y fue ahí cuando el Viktoria Plzen mejoró sus prestaciones, sobre todo cada vez que Duris entraba en contacto con el balón. Los mejores momentos del cuadro rival minimizaban a un Villarreal que buscaba la contra para subsistir en los primeros diez minutos del segundo asalto. Y casualmente, tras una gran jugada individual, Baptistao clavó un puñal por la espalda a su oponente.
Baptistao no para de marcar
Baptistao, que también marcó en Viena en la primera jornada, agarró el cuero en el centro del campo, se libró de dos rivales y batió con la pierna zurda --condujo con la derecha-- ajustando al palo de la porteríad defendida por Kozacik, que nada pudo hacer ante la potencia del brasileño.
El gol apagó la fuerza de los checos que --para colmo-- perdieron a Prochazka a falta de diez minutos para el final. Samu y Trigueros le dieron aire fresco al Villarreal, que salió satisfecho de El Madrigal y ya piensa nuevamente en Liga, competición donde gobierna tras seis jornadas.
