Llegaba el Real Madrid a la gran cita copera como gran favorito por las sensaciones de ambos equipos en las últimas semanas. Los de Ancelotti con goleada en Anfield, los de Xavi tras caer ante Manchester United y Almería y con las bajas de Pedri, Dembélé y Lewandowski.
Los primeros minutos fueron buena muestra de estas sensaciones y vimos a un Real Madrid muy dominador ante un Barça que sorprendió con una puesta escena muy conservadora renunciando al balón y esperando atrás. Modric dio el primer susto en el primer minuto atacando la espalda de Koundé y plantándose dentro del área, pero su disparo se marchó fuera. Benzema marcó a los doce minutos tras una buena asistencia de Vinicius, pero el colegiado lo anuló por un claro fuera de juego del francés.
Parecían pasar pocas cosas en el partido hasta que pasado el minuto 20 tuvo tramos de calentón. Munuera Montero mostró una cartulina amarilla a Vinicius por un lance con Frenkie de Jong que fue muy protestado tanto por el brasileño como por la grada del Bernabéu y no tardó el Barça en adelantarse en una jugada en la que Camavinga perdió el balón de espaldas y los culés salieron rápido con Ferrán y Kessié. Courtois se impuso al marfileño en el mano a mano, pero el rechace se coló en la portería después de chocar en Militao.
Carvajal tuvo la más clara para los madridistas poco antes del descanso en una incorporación por la banda derecha, pero su volea se marchó por encima del larguero. El Barça, con prácticamente nada, se iba al descanso por delante en el marcador.
El Real Madrid salió más activo a la vuelta de vestuarios y mordió en los primeros minutos, pero no llegó a inquietar seriamente a Ter Stegen. Los minutos pasaban y las ocasiones más claras llegaron en la portería de Courtois. Ferrán Torres pudo hacer el 0-2, pero no alcanzó a rematar un buen centro de Raphinha desde la izquierda, y pocos minutos después Ansu Fati, sí Ansu Fati, sacó bajo los palos un remate de Kessie.
Rodrygo tuvo una buena ocasión para empatar en los minutos finales con un chut desde fuera del área que se marchó rozando el palo de la portería de Ter Stegen.
Finalmente el Barça aguantó y logró sacar oro de un Clásico de mínimos en el que ambos equipos decepcionaron. Queda todo abierto y por decidir para el partido de vuelta, el miércoles 5 de abril en el Camp Nou.