San Mamés será el escenario del estreno liguero del Athletic de Bilbao y del FC Barcelona en el tercer duelo entre ambos equipos en apenas diez días después de la Supercopa de España, torneo que dio el primer título al club rojiblanco en 31 años y acabó con las opciones de sextuplete del azulgrana. Para el equipo bilbaíno será además la rúbrica a una intensa semana que comenzó el lunes con ese triunfo en el Camp Nou al que siguió la apoteósica celebración del martes en Bilbao y, sin apenas tiempo para digerir toda esa vorágine, el choque europeo del jueves Eslovaquia.
La derrota frente al Zilina en el descuento por 3-2 en un partido que los de Ernesto Valverde dominaban sin apuros por 0-2 a la hora de partido ha emsombrecido en parte esos cinco días idílicos que comenzaron con el espectacular 4-0 de la pasada semana frente al propio Barça. Tras dar descanso a un buen número de titulares en ese partido de ida del 'play off' de la Liga Europa, en el que introdujo ocho cambios, el técnico volverá a alinear para este debut en la Liga al mejor once posible, teniendo en cuenta las bajas y los problemas físicos que afectan a la plantilla. Mikel San José, Ander Iturraspe e Iñaki Williams, que recayó en Zilina de su lesión muscular, además del sancionado Kike Sola no podrán jugar frente al Barça. Además, Xabi Etxeita, fijo en el centro de la defensa, es seria duda debido a un problema en una de sus rodillas. Las principales dudas en ese equipo titular es la posibilidad de que Gorka Elustondo juegue de inicio dando descanso bien a Gurpegui en el centro de la defensa o a Rico en el medio centro y la identidad de interior zurdo para la que optan Ibai Gómez y un pujante Sabi Merino. Mientras, el Barcelona intentará saldar una cuenta pendiente con el Athletic de Bilbao, que recientemente le ha arrebatado la Supercopa de España, y lo hará con algunas bajas en la zaga que su técnico, Luis Enrique Martínez, deberá recomponer.
A las ausencias por sanción de Jérémy Mathieu, que cumple ciclo de tarjetas de la temporada pasada, y Gerard Piqué, suspendido cuatro partidos por el juez único de Competición tras su expulsión en la vuelta de la Supercopa, se unen las de los lesionados Adriano Correia y Douglas Pereira. Por suerte, Luis Enrique recupera a Jordi Alba, alejado de los terrenos de juego las últimas dos semanas por una lesión en los isquiotibiales de la pierna derecha y que hoy mismo ha recibido el alta médica. Sin embargo, el técnico asturiano ha dejado entrever que el lateral aun no está para noventa minutos y no ha querido confirmar que mañana será titular en San Mamés.
En cualquier caso, Luis Enrique confía en que se vea un Barça muy diferente al de la Supercopa. "Estamos frescos y llegamos mucho mejor que a los dos partidos anteriores", ha subrayado el técnico del conjunto catalán, quien ha insistido en que las circunstancias que rodean al partido "son totalmente diferentes" a las de la última semana. Luis Enrique tiene razón. Ahora, no es el Barça sino el Athletic el que llega físicamente mermado tras viajar a Eslovaquia para disputar contra el Zilina la ida de la previa de la Liga Europa, algo que los azulgranas intentarán aprovechar. Además de la duda del lateral zurdo -Jordi Alba, en principio debería entrar en el once-, Luis Enrique debe decidir quien sustituye a Piqué como compañero de Mascherano en el eje de la zaga: si el canterano Marc Bartra, que parece llevar cierta ventaja por lo visto esta pretemporada, o el belga Thomas Vermaelen. Otra de las incógnitas en el once del Barcelona está en la portería. Todo parece indicar que el Zamora de la pasada campaña, el chileno Claudio Bravo, volverá a ser el portero de la Liga, en detrimento, un año más, del alemán Marc-André Ter Stegen. El resto del equipo titular será el habitual, aunque esta vez volverá a ser Rafinha el sustituto de Neymar da Silva -hoy volvió a entrenarse tras superar unas paperas pero no ha entrado en la lista- en el tridente ofensivo, toda vez que Pedro ha abandonado el Barça esta semana para fichar por el Chelsea.