El Real Madrid se ha proclamado este sábado campeón de Liga por trigésima sexta vez en su historia al granar al Cádiz por 3-0 y aprovechar la derrota posterior del Barcelona en el campo del Girona por 4-2.
El propio Ancelotti y fuentes del club, aseguraron durante la semana que no habría ninguna celebración en caso de ser campeones ni el autobús descapotable llevaría a los futbolistas a Cibeles, vallada en la noche del sábado pero sin la pasarela en la que festejan los jugadores ni la grúa que sube el capitán para poner la bufanda.
La policía acordonó la fuente y evitó que se cortara el tráfico pese a la cantidad de aficionados del Real Madrid que fueron llegando a cuentagotas.
Mientras, los jugadores fueron abandonando el Bernabéu, con también cientos de seguidores celebrando en los bares anexos y despidiendo con cánticos a los campeones.
"Xavi quédate" y referencias a Joan Laporta, técnico y entrenador del Barcelona, se entremezclaron con el clásico "campeones, campeones" y otros cánticos madridistas que suenan en cada encuentro en el Bernabéu.