El partido comenzó con intensidad, con un gran ritmo que se volvió frenético en ambas áreas, ya que los célticos, con una presión alta para cortocircuitar la salida del balón de los verdiblancos, se adelantaron muy pronto en el marcador, en una acción muy rápida a los 6 minutos, cuando el noruego Larsen remató desde la derecha un buen servicio del activo Carles Pérez.
La alegría, sin embargo, sólo le duró tres minutos al conjunto celeste, pues el Betis, que dio un paso adelante y se pareció al equipo más incisivo y vertical de otras citas, acortó distancias en el minuto 9 gracias al oportunista Juanmi, quien empalmó dentro del área un rechace que cazó Guardado, muy atento, a la salida de un saque de esquina.
A partir de ahí, el choque siguió igualado, con una tremenda lucha de ambos en el medio campo y a la espera de cualquier fallo para sorprender a las defensas y tomar la delantera en el marcador, lo que logró el Betis, en el ecuador de este primer tiempo, con un tiro certero de Sergio Canales tras un grave error atrás del ghanés Aidoo.
De ahí al descanso, Luiz Felipe pudo ampliar la renta local con un cabezazo en el minuto 31 que despejó Iván Villar y en otra ocasión de Borja Iglesias. Aunque fue el Celta, que nunca bajó los brazos, el que logró el empate a tres minutos del descanso con un golazo de Gabri Veiga.
El joven centrocampista gallego controló a la perfección un pase al hueco de Luca de la Torre y batió con un toque sutil por alto a Rui Silva, lo que le dio bastante tranquilidad al Celta para salir con más brío en la segunda mitad e intentar sorprender por velocidad a la imprecisa zaga del cuadro sevillano, en especial en las llegadas por bandas.
Sin embargo, el Betis se mantuvo firme y, sabedor de la importancia de los puntos en litigio y avisó pronto con un remate de Juanmi a pase de Miranda. Aún así, el Celta, con un entramado defensivo y Carles Pérez, en la creación, muy entonados, atacó con peligro y encontró premio a los 53 minutos con el 2-3 de Gabri Veiga, al remachar con la zurda un buen servicio de un dinámico Larsen.
Fekir buscó el empate en una falta directa, sin éxito, mientras el que no perdonó fue el ghanés Aidoo en el 69, al hacer el 2-4 con un magnífico testarazo desde el punto de penalti tras un córner. El Celta, muy intenso en la presión y rápido en su juego, pudo ampliar su renta en el 77, pero Sabaly salvó el gol en la misma línea a remate de Iago Aspas.
Los béticos no arrojaron la toalla, ni mucho menos, y, ya con los cambios ofensivos de Pellegrini y tras un fallo en el 79 del brasileño Abner Vinícius, solo ante la meta céltica, acortó distancias con el 3-4 de penalti de Fekir por manos de Mingueza, tras avisar el VAR al árbitro y verlo en la pantalla a pie de campo.
Tuvo el quinto Aspas, a pase del debutante suizo Haris Seferovic, aunque también pudo marcar Édgar, por dos veces y ya con su equipo con uno menos por la expulsión de Luiz Felipe tras una acción con Aspas, en el tiempo añadido, pero los béticos no atinaron y perdieron una gran ocasión para afianzarse en lo más alto.