El Milan volverá a disputar unas semifinales de Liga de Campeones 16 años después de la última vez. Lo consiguió tras una eliminatoria en la que despertó de su sueño a un Nápoles (1-1, 2-1 resultado global) que pese a todo será histórico, pero en la que rubricó un perfecto ejercicio de resistencia y una demostración de madurez que le abrió las puertas a una gloria que puede ser aún mayor.
En la primera parte, Leao provocó un penalti que Meret detuvo a Giroud. El atacante francés del Milan se olvidó del fallo anotando el 0-1 para el Milan al filo del descanso tras una gran jugada de un Leao vestido de Maradona en territorio napolitano
En el minuto 82, el Nápoles pudo volver a soñar con la gesta… pero Kvaratskhelia también erró un penalti ante el portero milanista Maignan. Ya en la prolongación, Osimhen empató el partido (1-1) pero era demasiado tarde para un Nápoles que tuvo que despertar del sueño. El Milan vuelve a estar entre los mejores 16 años después.
El Manchester City quiere rematar al Bayern
Parece imposible pensar en que los 'Cityzens' se queden fuera, después del nivel mostrado en casa y de la imponente victoria (3-0) ante los bávaros, pero sabida es su constancia para decepcionar en Europa y cómo le tiemblan las piernas a los ingleses en los grandes escenarios en el Viejo Continente. Y pocos hay más espectaculares que el del Bayern, una caldera para buscar el milagro.
Por eso Guardiola no se guardará nada y puede repetir el once que venció en el Etihad Stadium hace una semana. Un equipo comandado por Erling Haaland que lleva cinco goles en los últimos tres partidos y doce en los últimos cinco.
El Bayern llega al duelo de vuelta contra el City en medio de una crisis que probablemente es la más honda de la última década y consciente de que sólo un milagro podría evitar la eliminación de la Liga de Campeones. A todo ello se han agregado turbulencias internas tras el incidente entre Sadio Mané y Leroy Sané después del partido de ida contra el City.
El Benfica busca la gesta ante el Inter
El Inter de Milan defenderá este miércoles en su casa el rédito de dos goles obtenido en Lisboa ante un Benfica en horas bajas que necesita tres goles para rubricar la gesta y acceder a las semifinales de Liga de Campeones.
En el partido de ida el bosnio Edin Dzeko fue titular arriba en el Inter, pero Inzaghi podría optar por el belga Lukaku para formar dupla con el argentino Lautaro, indiscutible. La otra única duda del técnico reside en el centro del campo, ya que puede contar tanto con el Brozovic como con Calhanoglu.
El Benfica se presenta al partido de vuelta distante de su mejor momento e inmerso en una plena crisis de confianza que una victoria en San Siro podría remediar fácilmente. En la visita a Milán, el técnico Roger Schmidt volverá a contar con su capitán, el central argentino Nicolás Otamendi, que no estuvo en la ida por sanción.
