Según los organizadores, la acción se llevará a cabo en un momento en el que la UEFA ha sido demandada por la asociación Drets por "vulneración de derechos fundamentales de los catalanes".
La idea de las citadas entidades es que los seguidores azulgrana desplieguen las banderas en el momento en el que los jugadores salten al terreno de juego y en el minuto 17 y 14 segundos de la primera y de la segunda parte.
Después de que la exhibición de este tipo de banderas se haya producido históricamente en el Camp Nou y en grandes finales europeas por los aficionados barcelonistas sin ningún tipo de incidencias, la UEFA sancionó al Barça con 30.000 euros por este motivo en la final de la Champions de 2015 que se disputó en Berlín.
Pese a los recursos presentados y al diálogo que se abrió entre ambas instituciones durante la temporada pasada, la UEFA sancionó nuevamente al club catalán con 150.000 euros por la exhibición de estas banderas en los partidos de la Liga de Campeones a lo largo de toda la temporada, sanción que fue recurrida ante los tribunales por la asociación de juristas Drets.