El Athletic cae eliminado ante el APOEL

El Athletic Club desaprovechó el enorme dominio que ejerció sobre el APOEL de Nicosia en el GSP Stadium de la capital chipriota y cayó eliminado de una Liga Europa en la que tenía puestas muchas ilusiones y de la que le ha dejado fuera la enorme pegada del conjunto local, que remontó la eliminatoria este jueves con un triunfo por 2-0.

Fueron el ariete Pieros Sotiriou, tras un centro de George Efrem, y Yannis Gianiotas, transformando un discutible penalti que le señalaron a Mikel Balenziaga sobre él mismo, los que castigaron la inoperancia de los 'leones' ante la meta de Boy Waterman. En el cómputo de los dos partidos, el conjunto vasco dispuso de muchas más ocasiones de gol, pero el APOEL tuvo mucha más pegada en las que gozó. Un fuerte varapalo para el Athletic, que queda eliminado de la competición en el que más esperanzas tenía concitadas y en la que mantenía la ilusión de alcanzar el primer título europeo de su historia.

Con Etxeita y Susaeta como relevos de los lesionados Laporte y Aduriz y Williams en la punta de ataque, el Athletic fue mejor en el arranque a un APOEL con las novedades del navarro Astiz y el gaditano Barral en la alineación. Ese mejor inicio rojiblanco se reflejó en una llegada a los dos minutos de juego de Williams, que no conectó un buen disparo ya dentro del área tras aprovechar un resbalón de Astiz Todavía en los primeros minutos, en el siete, el APOEL tuvo la primera buena ocasión del encuentro, un remate de Efrem después de que Barral peinase en el primer palo una jugada de Gianniotas que repelió Iraizoz.

A partir de ahí, en un partido un tanto descontrolado y con los dos equipos con problemas para controlar el juego, casi todas las llegadas fueron del Athletic, que se mostró superior aún sin dar demasiada confianza en sus combinaciones. En esa dinámica, la mejor oportunidad visitante fue una de Williams a la contra. Pero no acabó armar bien su disparo desde la frontal como para superar a un sólido Waterman. Esa jugada originó un córner en el que Beñat intentó un gol olímpico y Susaeta se encontró con un bosque de piernas en su intento de aprovechar el despeje del meta holandés a otro nuevo saque de esquina.

Una caída de Vinicius en él área bilbaína por un pisotón de San José que pudo ser penalti y una llegada en la que Sotiriou no logró rematar como quería fue todo lo que dio más en la primera mitad el equipo local. El Athletic, sin hacerse de todo con el control del partido, buscó el primer tanto acercándose el descanso con un disparo de Raúl García tras un golpe franco y un remate mordido de Muniain.

El partido y la eliminatoria cambió de rumbo nada más comenzar la primera mitad. Concretamente a los 20 segundos, lo que tardó el APOEL en marcar el primer tanto. Lo hizo Sotiriou rematando en escorzo en el primer palo adelantándose a Etxeita y aprovechando un excelente centro desde la izquierda de Efrem, al que no molestó lo suficiente De Marcos. Y aún se le pusieron peor las cosas al Athletic en el minuto 54, tras un discutible penalti de Gianniotas de Balenziaga que transformó el propio Gianniotas. Iraizoz estuvo a punto de detener el balón, pero el balón besó la red.

Dos duros golpes para el equipo de un Valverde que dio entrada al 'cachorro' Villalibre, a Iturraspe y hasta al recuperado Sabin Merino, y que recibió un rayo de esperanza con la expulsión de Sotiriou en el minuto 65, todavía con media hora por jugarse. No le sirvió de mucho por su falta de recursos para sobrepasar la tupida línea defensiva local.

De hecho la primera gran ocasión desde la expulsión de Sotiriou fue de Vander, que mandó a las nubes en el minuto 83 un buen balón que le dejó Gianniotas en el área en una buena contra. De ahí al final sí que tuvo opciones el Athletic, pero Williams estuvo negado ante al meta rival y tanto a él como a sus compañeros, acompañados por Iraizoz en el área rival en todos los minutos de descuento, les faltó algo de suerte en los acciones decisivas. Como en San Mamés, que fue donde el APOEL cimentó el pase a unos octavos de final que le dio su impresionante pegada.