Con rotaciones masivas en ambos equipos de inicio, a pesar de la importancia que le daban al primer puesto y pensando más en el descanso de sus jugadores de cara a los cuartos de final del fin de semana, el partido no tuvo tintes de ser de un Europeo sub-21.
Ritmo muy bajo, de Ucrania en la posesión, que dominó con claridad en la primera mitad, y de España en la presión. Una relajación que estuvo a punto de costarle muy caro al conjunto ucraniano.
Dos errores en la entrega del central Volodymyr Saliuk provocaron sendos mano a mano de Sergio Camello, en os minutos 6 y 28, pero en ambos el futbolista del Atlético de Madrid se entretuvo a la hora de definir y erró ante un Ruslan Neshcheret que estuvo a punto de ser protagonista.
El guardameta del Dínamo de Kiev, quien sorprendió en 2020 firmando un gran partido, cuando era tercer portero del conjunto ucraniano, en el Camp Nou con solo 18 años, perdió el balón en un saque y provocó un tanto de Rodrigo Riquelme en el minuto 20, pero fue anulado por un contacto previo de Sergio Camello sobre el meta que, a juicio del colegiado, provocó la pérdida.
Desaprovechó estos regalos España, pero Ucrania, a la segunda, no. error en el pase del guardameta Julen Agirrezabala en el minuto 8 provocó la primera ocasión de la selección ucraniana, que no desperdició la siguiente.
Un fallo en la salida del balón pilló descolocada a la defensa española, con Oleksadr Nazarenko ganándole la carrera a Manu Sánchez y sirviendo un balón perfecto para un cabezazo de Bogdan Viunnyk que puso el 0-1 en el minuto 43.
Y en ese devenir más de amistoso que de Europeo, faltaba un gol en propia puerta tras un rebote. Y así fue. Minuto 49, pared entre Aimar Oroz y Rodrigo Riquelme, que sirvió un pase atrás que Ivan Zhelizko metió en su portería después de que le rebotase el balón en el despeje de su compañero Oleksandr Syrota.
El guion del partido cambió, con España dominando el esférico, pero especulando con él y sin buenas ocasiones para dar la vuelta al marcador. Hasta que llegó otro error grave que volvió a poner a Ucrania por delante.
Balón largo ante el que Hugo Guillamón y el guardameta Leo Román se confían, Danylo Sikan se adelanta a ellos y Román acaba haciendo un claro penalti que transformó Georgiy Sudakov en el minuto 81 y que le daba la primera plaza a Ucrania.
Sin embargo, España recurrió a la magia de Rodri Sánchez y a la experiencia de Abel Ruiz, dos habituales titulares que entraron desde el banquillo, para volver a igualar el choque en el minuto 90 y lograr un empate que la clasifica como primera del Grupo B.