El partido fue como lo anticipó el seleccionador español, Venancio López, de "extrema dificultad" y cerrado. En tres minutos España se insinuaba, pero no había ninguna opción clara ante la marca férrea de los kazajos, que pronto empezaron a acumular faltas.
Precisamente en el saque de una falta Sergio Lozano logró abrir el marcador cuando dejó sin opción a Higuita y contagió a Miguelín para probar una vez más los reflejos del portero, que hasta ese punto sólo estudiaba el juego. Una vez se soltó el portero Higuita, el choque en el Coliseo Iván de Bedout de Medellín se equilibró.
Apenas abandonó la portería, se acercó con peligro Dauren Nurgozhin, pero fue con un disparo suyo que Paco Sedano cedió dejando un rebote que Chingiz Yessenamanov envió al fondo de la red.
Higuita, un dolor de cabeza
Ese 1-1 que nació en los pies de Higuita reconfortó a Kazajistán, que incomodó al campeón de Europa que tuvo poca fluidez en ataque, pues apenas pudo reaccionar con los remates de Lozano que, de alguna forma, le hicieron retomar el control del compromiso.
No obstante, se intensificó el duelo Higuita-Sedano del que salió bien librado el goleador español, como también lo hizo en un libre directo de Douglas y en el remate que acabó estrellando en el palo Nurgozhin. Con un Mario Rivillos influyente, la Roja creció en el juego y convirtió a Higuita en figura entre los tres palos.
Tuvo una oportunidad clara con Lozano, pero fue Bebe el que anotó el segundo tanto español en un buen desborde de Rivillos.
Al estar de nuevo arriba en el marcador afloró el mejor futsal de la bicampeona mundial, hasta el punto que Higuita realizó tres atajadas determinantes ante Lozano, Miguelín y Bebe. Kazajistán hizo pasar apuros a los ibéricos al sorprenderlo con la anotación de Nurgozhin, en el mejor momento de la Roja.
Falla en la zaga kazaja
Sin embargo, un fallo en la defensa kazaja le permitió tomar ventaja de nuevo con el gol en contra de Nurgozhin. Los robos de algunos balones dieron a los españoles opciones de ampliar la diferencia.
Un gol anulado al quinteto de López, conseguido por Lozano, puso polémica al encuentro, pues el juez iraní Vahid Arzpeyma consideró de forma equivocada que hubo falta sobre Higuita.
Asimismo, provocó protestas la extraña expulsión de Lozano, que salió -al igual que Aicardo- lastimado de la pista. El cierre fue vibrante. La Roja, con tres hombres de campo tuvo que lidiar con el juego de cinco al que apostaron los kazajos.
La estrategia no le funcionó a Cacau, pues con los goles de Raúl Campos y Miguelín los españoles confirmaron su pase a cuartos de final
