Eslovaquia llega a la Eurocopa con la satisfacción de haber hecho una buena fase previa, de haber competido a Portugal y de haber cuajado un grupo férreo en el que todos saben desempeñar su papel. Y quieren competir. En la pasada Euro se quedaron a un paso de los octavos, pero en esta ocasión el grupo les da más esperanzas. Además, han recuperado a algunos de sus puntales y llegan con la confianza de que nadie va a poder ganarles con facilidad.
El Objetivo: Pasar a octavos
Lo acariciaron en la última ocasión, pero España y Suecia se lo impidieron. Ahora, tras una buena fase previa y salvando el favoritismo de Bélgica, quieren pasar por encima de Rumanía y Ucrania para meterse en la fase del KO; a los polacos ya les conocen porque han compartido sede en los últimos años. Se saben invisibles a los focos y esa posición de víctima les va bien para hacer los partidos incómodos y aprovechar con paciencia las oportunidades que les den los rivales.
El Crack: Milan Skriniar
El central del PSG es el futbolista más importante que ha tenido el país en los últimos años. En el Inter era capitán y líder de la zaga, pero una lesión le ha complicado mucho la temporada en París y llegará a la Euro demasiado fresco, y puede que falto de confianza. Aun así, ejercerá su liderazgo en un equipo muy disciplinado y estará más arropado que en el PSG, así que podremos ver una buena versión de él.
Debilidades: Falta de calidad en ataque
Eslovaquia juega con tres delanteros, pero ninguno tiene nivel para generar goles por sí solos. Mak, Bozenik y Suslov trabajan más de lo que golpean, y ante equipos de más nivel tendrán pocas oportunidades en el área rival. Quizás su acierto dependa de los pases largos de Lobotka. Los eslovacos tendrán que mejorar para tener más alternativas de ataque.
El once de Eslovaquia
Duvravka – Pekarik, Vavro, Skriniar, Hancko – Kucka, Lobotka, Duda – Mak, ThBozenik, Suslov