El España contra Italia es ya clásico en el fútbol internacional, casi una final anticipada, un cruce que parece estar destinado a encontrarse en cada torneo en el que hay oportunidad. Como si fuera una forma de medir el estado de forma de cada selección: cómo han evolucionado sus veteranos y cómo han irrumpido sus jóvenes promesas. Es uno de los platos estrella que cada cuatro años nos regala el fútbol.
El encuentro de este jueves puede determinar quién es el primer clasificado del grupo B de la Eurocopa, al que acompañan Croacia y Albania. Aunque no es la última oportunidad de clasificarse -ni para España, ni para Italia-, llegar tranquilos al tercer partido, tras haberse impuesto a tu vecino y máximo rival, bien puede valer unos octavos más descansados... y quién sabe si más, en el futuro.
Por cierto que por hablar más de casualidades, el grupo de aquella Eurocopa que ganó España en la que se impuso a Italia por un histórico 4-0 estaba compuesto por Croacia, Italia y España. Casi, calcado al de esta edición.
Mucho ha llovido desde entonces, desde que la selección española cerró un ciclo histórico conquistando dos Eurocopas y un Mundial en un periodo de cuatro años bajo los mandos de Luis Aragonés primero y Vicente Del Bosque después.
Un ciclo histórico
España logró levantar su última Eurocopa el 1 de julio de 2012 en el Estadio Olímpico de Kiev tras una exhibición de fútbol ante Italia en la que arrolló a la azzurra endosándole un 4-0 con goles de David Silva, Jordi Alba, Fernando Torres y Juan Mata.
El once titular de España ese día estuvo formado por Iker Casillas, Álvaro Arbeloa, Sergio Ramos, Gerard Piqué, Jordi Alba, Sergio Busquets, Xabi Alonso, Xavi Hernández, Andrés Iniesta, David Silva y Cesc Fábregas. En la segunda parte salieron Pedro Rodríguez, Fernando Torres y Juan Mata.
De estos catorce jugadores que participaron en la final quedan seis en activo y solo dos en Ligas de primer nivel: Sergio Ramos (Sevilla) y Pedro (Lazio).
España dominó de principio a fin la Eurocopa 2012, en la que se impuso en fase de grupos a Italia (1-1), Irlanda (4-0) y Croacia (0-1). En cuartos de final eliminó a la siempre poderosa Francia ganándole 2-0 con un doblete de Xabi Alonso y en semifinales se impuso en la tanda de penaltis a la Portugal de Cristiano Ronaldo.
