Laporte se probó con el resto de sus compañeros y, tras realizar trabajo de campo en la tarde del lunes, completó la sesión matinal del martes integrando el grupo. El jugador supera así una sobrecarga muscular que le impidió jugar ante Croacia en Berlín y apura sus opciones para poder tener minutos ante Italia en Gelsenkirchen.
Mientras, los dos capitanes de la selección española calmaron la inquietud que podía existir tras retirarse antes de tiempo del estreno en la competición. Morata, que ayer trabajó en el gimnasio, volvió a pisar el terreno de juego sin molestias por el fuerte golpe que sufrió ante Croacia. Rodri, que ha tenido dos días de descanso con tratamiento fisioterapéutico, se volvió a calzar las botas sin sentir malas sensaciones por los calambres que sufrió el sábado. No han derivado en ningún problema muscular y pudo completar la sesión.
De la Fuente decidió cerrar el entrenamiento para preparar al detalle el duelo ante Italia, trasladando al campo los aspectos tácticos vistos en vídeo y en las charlas con sus jugadores. Tras un calentamiento animado con música en la carpa anexa al campo de entrenamiento en el centro deportivo SV Aasen, los 26 internacionales se ejercitaron en una sesión que superó la hora y diez minutos de duración. El seleccionador no ha dado pistas a sus futbolistas sobre la idea de equipo titular que tiene para enfrentarse a Italia y si realizará algún cambio de inicio. Un segundo triunfo aseguraría el liderato de grupo y le daría la posibilidad de rotar a todo el equipo en el partido que cierra el grupo ante Albania.