Suiza sigue siendo bella y altanera y su fútbol una metáfora de su estabilidad en los últimos años. El crisol de culturas de su inmigración sigue alimentando al fútbol suizo y a toda Europa, porque la selección suiza sigue siendo el lugar de encuentro de futbolistas que triunfan en los niveles medios de las grandes ligas. Con la veteranía de Sommer o Xhaka y el empuje de Okafor o Ndoye, Suiza puede hacer un papel muy digno en esta Eurocopa, como la lo hizo en el Mundial de Catar, donde llegó a cuartos de final.
El objetivo: romper la barrera de los octavos de final
Tras el éxito del Mundial, las miradas están en los cuartos de la Euro. Allí no llegan desde hace medio siglo y casi siempre han quedado a las puertas.
El último escalón, ese top-8, es el gran tesoro que anhela este equipo; una vez desbloqueado, todo sería soñar. Sin embargo, nadie parece estar muy pendiente de un equipo que no ha hecho su mejor fase de clasificación, pero que se ha con Murat Yakin en un bloque sólido, difícil de atacar y que va apuntalando a sus talentos ofensivos. Suiza parece una moneda al aire, como siempre.
Suiza puede hacer un papel muy digno en esta Eurocopa, como la lo hizo en el Mundial de Catar, donde llegó a cuartos de final.
El crack: Yan Sommer
No parece demasiado estimulante que tu estrella sea tu portero, pero así es el fútbol suizo, veterano y fiable. Lo cierto es que Sommer ha encontrado su madurez definitiva en el Inter de Milán, donde ha desterrado sus viejos errores del pasado y se ha consolidado como uno de los mejores arqueros del continente. Además, es capitán del equipo y dirige a una defensa que ahora sí parece funcionar. Por supuesto, Akanji, ya campeón de todo con el Manchester City, o Xhaka, en una segunda juventud en el campeón Leverkusen, serán integrantes de la sólida columna vertebral de los helvéticos.
Debilidades: falta un goleador
Las esperanzas ofensivas de los suizos deberían pasar por las botas de Okafor, un delantero que triunfó en Salzburgo.
Pero en el Milan no ha encontrado su sitio, ha pagado sus lesiones y no ha tenido continuidad.
Llegará a la Eurocopa sin las buenas sensaciones del pasado pero, eso sí, descansado. Si Okafor no funciona, Suiza dependerá de Vargas y Ndoye, dos extremos sin gol, o del joven Amdouni, que arrastra un año de sequía en su primera temporada en la Premier.
El once de Suiza
Sommer – Widmer, Akanji, Schar, Rodríguez – Freuler, Xhaka, Zakaria – Ndoye, Okafor, Vargas