El Getafe se acerca a puestos europeos y hunde a Las Palmas

El Getafe, con dos goles de Juan Cala y Amath N'Diaye en los primeros catorce minutos, cerró el año con una victoria que le acerca a puestos europeos frente a la UD Las Palmas, que se mantiene colista y suma ya doce derrotas en diecisiete jornadas.

Sin apenas tiempo para que la gran cantidad de aficionados que llegó tarde al estadio pudiera sentarse, el Getafe golpeó por primera vez a los cinco minutos. Fue tras un saque de esquina, con un centro de Damián Suárez que Juan Cala remató de cabeza desde el punto de penalti para batir a Raúl Lizoain.

El conjunto canario pudo igualar el choque poco después por medio de Remy, que robó un balón perdido por Amath, hizo lo más difícil, recortar a Djené y, solo ante Guaita, mandó su disparo fuera. El que no perdonó en su segunda llegada fue el Getafe.

Antunes hizo una buena jugada por la banda izquierda, llegó hasta línea de fondo y puso un balón raso atrás para que Amath rematara a gol el segundo tanto. Este gol fue un mazazo para Las Palmas, que ofreció un fútbol lento, sin profundidad y con pocas ideas.

El Getafe tuvo ocasiones muy claras

Una de sus escasas llegadas a la meta rival fue con un disparo dentro del área de Calleri que, solo ante Guaita, sacó el portero valenciano. Antes del descanso, el Getafe pudo ampliar su diferencia con una buena jugada individual de Damián Suárez que terminó con un derechazo que rebotó en un defensor y Raúl Lizoain sacó el balón en la línea de gol.

No fue la única, ya que Jorge Molina, Amath o incluso el internacional marroquí Faycal Fajr pusieron a prueba al portero de Las Palmas, que vivió un partido sin descanso. En la segunda mitad, el conjunto canario pudo recortar distancias a los 51 minutos. Guaita falló en una salida al borde del área, despejó mal y dejó el balón en la frontal a Remy.

El francés, con la portería vacía, mandó su disparo por encima del travesaño. Esa acción, aunque desesperante para el conjunto canario, también sirvió para que se animara algo más en su planteamiento, moviendo sus líneas un poco más arriba con Jonathan Viera como eje de su juego.

Para no tener sobresaltos, José Bordalás modificó su esquema, sacó a Gaku Shibasaki y Mehdi Lacen para tener mayor contención en el centro del campo, y el partido se diluyó sin mucha historia ante la inoperancia del equipo canario y el oficio del conjunto madrileño, casi más pendiente del cronometro que del juego.

Aún así, el Getafe pudo redondear su victoria a los 87 minutos con un disparo de Ángel que, solo en el mano a mano con Raúl Liozain, estrelló en el pecho del portero.