Nunca antes había estado tan cerca de ser el mejor equipo del fútbol europeo. Y Pep Guardiola está a un paso de llevar a un club con 141 años de historia a ganar la máxima competición por primera vez. Tiene el equipo azul cielo de Manchester un palmarés que no se corresponde con su poderío actual. Al menos el gasto en fichajes de los últimos años tiene justificación en esta temporada.
A Estambul
El Manchester City ha sido mejor que el PSG en el global de la eliminatoria. Se puede decir que el equipo parisino propuso pero el cuadro inglés ejecutó. El 4-1 global no deja opciones a los que apostaban por la opción Neymar-Mbappé como finalistas. El próximo 29 de mayo en Estambul el que llevará la bandera de los llamados “clubes estado” será el Manchester City.
Pep Guardiola se ha quitado un peso de encima. Al técnico catalán ya no le llegaba el crédito con las victorias en la Premier. Territorio conquistado para un equipo que en 1998 estaba en la tercera división inglesa pero que en la pasada década ganó cuatro ligas. Reconocimiento máximo en Inglaterra pero insuficiente para dar el salto a la condición de grande.
Tercera corona
La asignatura pendiente se llamaba Europa y por eso en las oficinas “citizen” se pensó en la figura de Guardiola. Llegó en la temporada 2016-17 y desde entonces el proyecto se caracterizó por una fuerte inversión pero con la barrera de cuartos en la Liga de Campeones con eliminaciones dolorosas contra equipos como el Mónaco (2017) o el Lyon (2020).
Ahora el City espera dar el paso definitivo en el estadio Ataturk el último sábado de mayo. Y Guardiola espera cerrar el ciclo de diez años sin probar el sabor de una Champions. No pudo con el Bayern. Y borraría aquello de que no sabe ganar sin el Barcelona y sin Messi.
Sería su tercera Champions. Curiosamente, las dos que ganó como entrenador fue contra el gran rival de la ciudad: el Manchester United.