El verdiblanco Bakambu en el minuto 8 firmaba la primera llegada de un choque que comenzaba sin un claro dominador y dos más tarde Assane Diao veía cómo el meta rival evitaba el primero de la noche para los de Pellegrini, dos ocasiones para que el Betis comenzara a tomar el mando de las operaciones. Pasaban los minutos y el control verdiblanco, sin mucho ritmo, no servía para tomar ventaja en el marcador ante un Celje que se defendía sin excesivos esfuerzos; y el Betis, pitado por su gente, sin ideas en ataque y obsesionado con los lanzamientos lejanos, alcanzaba el descanso con un justo empate a cero.
Tras la reanudación, la tónica fue la misma y, al filo del minuto 59, Pellegrini tiraba de su banquillo para que el 1-0 llegara antes de que fuera imposible. Abde y Vitor Roque eran las apuestas del preparador chileno para agitar el choque. Ante los mejores minutos béticos, Albert Riera respondía con dos cambios para darle oxígeno a un Celje que acusaba el correr del reloj, recambios que coincidían con la entrada en juego de los béticos Altimira y Juanmi a menos de 20 minutos para el final. Cuando el pesimismo comenzaba a cundir en Heliópolis, el 1-0 en el 74 de Natan, un cabezazo del brasileño que acababa con el central sangrando tras chocar con un rival y siendo cambiado por Diego Llorente.
Sin embargo, cuando el Betis había hecho lo más difícil, vino el 1-1, firmado por el español Nieto en el minuto 81 después de aprovechar un medido envío desde la banda derecha. En pleno desconcierto local, Matko fallaba un claro a mano en el 84 que habría dejado a los de Pellegrini con escasas opciones de victoria. Cuando el empate parecía inevitable y mucha gente había abandonado el campo, Juanmi lograba en el minuto 94 el 2-1 tras una contra que finalizaba con una bonita vaselina. Un gol salvador para seguir con opciones de alcanzar la siguiente ronda de la Liga Conferencia.