Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), el juez ha admitido a trámite la querella presentada por la Fiscalía y ha citado a declarar al futbolista para el próximo 29 de octubre.
El interrogatorio del deportista argentino, imputado por dos delitos contra la Hacienda pública, es la primera de las diligencias acordadas por el juzgado para esclarecer las sospechas de fraude fiscal que sostiene la Fiscalía en su querella.
El ministerio público acusa al futbolista de no haber tributado en sus declaraciones de IRPF de los ejercicios 2011 y 2012 los ingresos recaudados con la explotación comercial de sus derechos de imagen.
Concretamente, la Fiscalía de Delitos Económicos sostiene que el futbolista eludió el pago de 1,5 millones de euros en impuestos simulando la cesión de sus derechos de imagen a empresas instrumentales situadas en países con una fiscalidad favorable.
El pasado mes de septiembre, una vez la Agencia Tributaria había comenzado a investigarlo, el deportista devolvió a Hacienda los 1,5 millones de euros defraudados, más otros 200.000 de intereses devengados, con lo que podrá beneficiarse de una rebaja de pena en caso de condena.
En su escrito, la Fiscalía de Delitos Económicos sostiene que, en los ejercicios de 2011 y 2012, Javier Mascherano ocultó al fisco su participación en las sociedades que ostentaban sus derechos de imagen y, de esa forma, eludió el pago de impuestos por los beneficios obtenidos con los mismos.
Según el fiscal, "con la finalidad de burlar esa obligada tributación", desarrolló una estrategia consistente en "dos conductas diferenciadas en su ejecución pero comunes en su propósito": no declarar las rentas obtenidas de la marca Nike a través de una sociedad domiciliada en Estados Unidos y simular la cesión de sus derechos de imagen a una sociedad puramente instrumental radicada en la zona franca de Madeira (Portugal).
La zona franca de Madeira, añade el ministerio público, "presenta un régimen fiscal especialmente favorable", con tipos de gravamen en el impuesto de sociedades muy inferiores a las generales, especialmente para las empresas constituidas antes de enero de 2001.
Mediante esa "estrategia de ocultación de los ingresos por explotación de sus derechos de imagen" obtenidos por Mascherano, sostiene la Fiscalía, el futbolista defraudó en el IRPF un total de 587.822 euros en el ejercicio de 2011 y de 968.907 euros en 2012.
Según concluye la Fiscalía de Delitos Económicos, la operativa defraudatoria pivotó sobre dos mecanismos: la ocultación de la titularidad societaria de las rentas obtenidas por el contrato con Nike y la "simulación absoluta -sin causa ni voluntad real de llevarla a cabo- de la cesión de los derechos de imagen del jugador a una sociedad domiciliada en una jurisdicción de conveniencia".
El sistema empleado por el futbolista para eludir supuestamente la tributación es similar al que ha comportado la imputación de su compañero de club y selección Leo Messi, a quien la justicia acusa también de evadir el pago de impuestos por las ganancias de sus derechos de imagen, mediante la creación de una estructura societaria domiciliada en paraísos fiscales.