Un gol de Javi Llabrés en el minuto 91 permitió al Mallorca salvar un punto en su visita a un Villarreal, que fue superior en juego y ocasiones, pero que no supo rematar a su rival cuando lo tuvo todo a favor.
El empate deja a ambos equipos como estaban, igualados y cerca de la zona de peligro, ya que el Villarreal sigue sin despegar desde la llegada a su banquillo de Marcelino y el Mallorca mantiene su racha negativa de jornadas sin ganar lejos de la isla.
El conjunto de Aguirre, consciente de la ansiedad del rival, tomó el mando del partido en los primeros minutos, en los que se plantó en territorio local y provocó algún que otro desajuste en la defensa del Villarreal.
El equipo de Marcelino tardó un cuarto de hora en soltar amarras en ataque y lo hizo guiado por Gerard Moreno, quien fue una amenaza permanente infiltrado entre las líneas baleares.
Dos disparos de Sorloth a las manos de Rajkovic y un lanzamiento de falta de Baena alto fueron las únicas acciones ofensivas de mérito de un Villarreal atenazado.
El Mallorca, por su parte, se conformó con mantener el rigor táctico defensivo e intentar aprovechar las imprecisiones de su rival, manteniendo al canadiense Larin aislado del resto de sus compañeros.
El encuentro entró en una fase de equilibrio e imprecisiones que desatascó una jugada aislada. Un centro de Álex Baena, ya al filo del descanso, fue aprovechado por Sorloth para adelantarse a los centrales y batir desde cerca la meta del Mallorca.
Tras el descanso, el Villarreal intentó defender su ventaja adueñándose de la posesión del balón, pero el Mallorca, más intenso, dio un paso adelante y comenzó a rondar el área de Jorgensen.
Un remate forzado de Nastasic y otro flojo de Larin confirmaron la aparente mejoría del Mallorca, que se lanzó a por el partido con la entrada de Abdón Prats por Antonio Sánchez y el cambio de dibujo táctico.
El Villarreal, sin la fiabilidad de antaño con el balón, se sintió más cómodo al contragolpe y estuvo cerca de sentenciar tras una nueva acción personal de Sorloth, cuyo remate final fue bloqueado por la defensa.
Con el partido dibujado para el contraataque, Marcelino dio entrada al debutante Gonçalo Guedes y el Villarreal, sin pasar apenas apuros, comenzó a acumular llegadas peligrosas, aunque sin puntería.
El portugués tuvo la opción de hacer el segundo, ya en el tramo final del partido, pero perdonó. El Mallorca, con todo su arsenal ofensivo en el césped, incluido el recuperado Muriqi, acabó encontrando el empate en una acción inesperada.
Javi Llabrés, que apenas llevaba tres minutos sobre el césped, cazó un centro para batir desde el centro del área a Jorgensen.
El Villarreal, ya sin tiempo, intentó reaccionar al nuevo mazazo, pero ya no tuvo fuerzas ni fútbol para superar a un Mallorca al que el punto sí supo a gloria
