Dos goles de Marcos Llorente en la prórroga, cuando el marcador era de 2-0 en contra y estaba eliminado, clasificaron al Atlético de Madrid para los cuartos de final de la Liga de Campeones con un triunfo por 2-3 ante el Liverpool en Anfield, en el que también tuvo mucho mérito Jan Oblak y en el que Álvaro Morata aportó el tanto final.
Sus paradas fueron fundamentales, como lo fueron los dos tantos del centrocampista madrileño, en el 96 y en el 105, que cambiaron un partido que apuntaba a derrota del conjunto rojiblanco, que finalmente ganó con el 2-3 de Morata en los instantes finales.
Antes, Georgino Wijnaldum (1-0) provocó la prórroga en el minuto 43 y Firmino, nada más comenzar los 30 minutos de tiempo extra, hizo el 2-0.