El asturiano, en rueda de prensa en la Ciudad Deportiva Dani Jarque, se mostró ambicioso y aseguró que a los futbolistas "les pone" este encuentro. De hecho, el nuevo responsable del banquillo destacó la fortaleza el vestuario y aseguró que está "mentalmente preparado para esta situación" y mentalizado de sus necesidades en la clasificación.
En cuanto al rival, Luis García asumió que se enfrenta a un reto complejo: "Es un grandísimo equipo, muy de Valverde y muy del Athletic. Tiene mucha intensidad y por eso debemos apretar en campo rival, estar atentos a las transiciones y a los centros laterales. Debemos ser un bloque atrevido".
El entrenador espera un Athletic "como si no hubiera jugado entre semana". "Han pasado cuatro días desde que jugaron (fue eliminado de la Copa a manos de Osasuna) y hay tiempo para recuperar. Tienen una plantilla amplia y un grandísimo entrenador que habrá gestionado las cargas y las rotaciones", señaló.
En cualquier caso, Luis García dejó muy claro que el Espanyol debe enseñar los dientes: "El rival ha recibido un palo gordo, pero mentalmente es muy fuerte. Somos nosotros los que nos jugamos las habichuelas. Los que nos jugamos algo de verdad somos nosotros y debemos hacerlo notar desde el primer minuto".
En el plano personal, Luis García reconoció que pensó "muchas veces" en el momento de salir al RCDE Stadium como entrenador del primer equipo. "Uno trabaja para mejorar y llegar al máximo nivel. Tengo muchas ganas de disfrutar de los jugadores y del entorno", confesó visiblemente satisfecho.
