El equipo malagueño inició el partido de forma trepidante, volcado el juego por la izquierda con el centrocampista Jony Rodríguez, uno de los fichajes, colgando balones al área, donde otro de los debutantes, el delantero Sandro Ramírez, se entretuvo en la primera acción de peligro cuando encaraba al guardameta Nauzet.
El Osasuna, bien posicionado, intentaba controlar el balón, que le duraba segundos por la presión malaguista, aunque a medida que iban pasando los minutos el posicionamiento era mayor y más efectivo ante un Málaga más espeso.
Algún destello de Sandro, con demasiada adrenalina, y dos disparos, uno del defensa uruguayo Federico Ricca, y otro del centrocampista venezolano Juanpi Añor, fuera, lo más reseñable en 36 minutos de encuentro.
Al siguiente minuto, la mejor ocasión del Málaga, tras un centro por la derecha de Keko y Sandro, en el área pequeña, conectó con un sutil toque, pero el guardameta Nauzet, interceptó el balón.
El conjunto pamplonica, muy conservador, inició la escalada en los instantes finales de la primera parte y creó un miedo escénico en la grada con un disparo del delantero Oriol Riera, que hizo intervenir al portero camerunés Carlos Kameni.
El 0-0 inicial se mantuvo en los primeros cuarenta y cinco minutos, que fueron de claro dominio local, pero con las mismas ocasiones de gol para cada equipo, una por bando.
El técnico malaguista, Juande Ramos, debutante en el banquillo, no veía frescos a sus pupilos e hizo un cambio en inicio de la segunda parte, dejando al centrocampista Keko Gontán en el vestuario por el delantero brasileño Charles Dias.
El Osasuna salió más valiente, dominando el centro del campo ante un Málaga diluido, excesivamente desestructurado, pero la calidad se paga, y una jugada sin excesivo peligro, con una internada por la izquierda de Jony, su pase raso y seco al área grande lo recogió Juanpi, que con un disparo ajustado al poste derecho adelantó a su equipo.
El Málaga se animó algo más tras el gol, aunque con carencias ofensivas, sobre todo de Charles, que dispuso de un par de acciones con posibilidades de gol, pero no estuvo fino, con una de ellas donde Nauzet, fue el salvador.
El Osasuna no se encerró, a pesar del varapalo, y el Málaga, desdibujado, demasiado irregular, cedió terreno y en una internada por la derecha, el central Llorente no pudo despejar el centro y Fran Mérida, introdujo el balón en la portería de Kameni, empatando el partido en el minuto 84.
El Málaga no reaccionó tras el gol, aunque 'Chory' Castro, tuvo la victoria en un rebote que llegó a la línea de fondo y su pase no encontró interlocutor.
Al final 1-1, con un punto conseguido por el Osasuna, muy práctico y trabajador.