El Manchester City selló su pase a semifinales de la Liga de Campeones con un empate (1-1) este miércoles ante el Bayern de Múnich en el Allianz Arena, penúltima ronda donde se medirá al Real Madrid como el año pasado con victoria española.
Los de Pep Guardiola se citan de nuevo con el temible campeón, el equipo de las 14 Copas de Europa, en busca de la primera para el club de Mánchester. Los ingleses, una máquina de fútbol con Erling Haaland en cifras para la historia, no sacaron su mejor versión en Múnich, pero los locales no atinaron.
El cuadro alemán cumplió de inicio el guion de la remontada obligada tras el 3-0 de la ida, pero le faltó lo más importante, el gol como en el Etihad Stadium, e incluso tuvo que dar gracias del 0-0 porque Haaland falló un penalti en el minuto 38. Fue una pena máxima que le cobró el árbitro Turpin a un Upamecano que, después de regalar el 2-0 de la ida, volvió a liarla.
El defensor francés se libró de la roja que llegó a ver por un fuera de juego previo y antes del descanso abrió los brazos dentro del área justo en el momento de un disparo sin peligro de Gündogan. La mano no tuvo consecuencias pero, sin tirar a puerta, sin dominar el balón y achicando, el City pudo irse por delante al descanso y jugando contra 10. Al Bayern le faltó puntería.
Coman fue el mejor, un quebradero de cabeza por banda con centros de peligro y Sané perdonó una muy clara en los primeros minutos, otro momento de los que pudo cambiar la eliminatoria. Goretzka también la tuvo y, cuando paró la presión alemana arriba, los ingleses encontraron pero no aprovecharon la jugada del penalti.
En la reanudación, el campeón de la Premier quiso ser protagonista y necesitó poco para que apareciera Haaland. El noruego avisó en la primera y, en la segunda, regateó a un Upamecano por los suelos por propia inercia para hacer el 0-1. Con su 12º en Champions, 41 esta temporada, el atacante celeste se desquitó del penal y sentenció la serie ante un Bayern gafado en ataque.
Thomas Tuchel, quien hace tres semanas cogió al equipo de Múnich en sustitución a Nagelsman, metió a Mané, Davies, Müller y Mathys Tel quemando naves antes de ser expulsado por protestar y fue Tel quien desperdició los intentos locales. Uno llegó a entrar, anulado por fuera de juego de Coman, y el gol de la honra llegó con Kimmich de penalti por una mano que detectó el VAR en el 83'.
El City será así el rival del Real Madrid por un puesto en la final, como el año pasado cuando los blancos firmaron una de sus épicas remontadas hacia el título. Ahora, el equipo de Pep Guardiola tiene el arma más afilada de Europa, Haaland, y jugarán la vuelta en suelo inglés, aunque el juego no siempre acompaña, como en Múnich.
Derbi de Milán en semifinales
El Inter vuelve a estar entre los grandes, en unas semifinales de Liga de Campeones tras 13 años alejado de ellas. Una hazaña con sabor argentino, gracias a los goles fundamentales de Lautaro y Correa, que certificaron el pase ante el Benfica (3-3, 5-3 resultado global) en un San Siro que albergará la eliminatoria de semifinales al completo, con un derbi de Milán histórico.
Con una idea muy clara de inicio de partido, guiado por el frenesí de un San Siro que jugó su propio partido, el Inter cumplió con su promesa de los días previos y jugó sin pensar en el resultado de la ida. Inzaghi mantuvo la presión alta y le metió la idea a sus jugadores de que todavía quedaba un mundo para llegar a las semis.