LA VISIÓN DE ENRIQUE ORTEGO SOBRE EL 'PELUSA'
La primera fotografía está ubicada en París, cuando Maradona recibió el Balón de Oro como mejor jugador del Mundial 86. Ya empezaba a fraguarse una buena relación con él. Yo era un simple reportero y siempre agradeceré el trato tan profesional y cumplidor que me dio Maradona. Siempre que le pedí entrevistas me las concedió.
Las siguientes imágenes llevan a recordar el Mundial de México. Me dijo que, si era campeón del mundo, iría a visitar el periódico para el que yo trabajaba, el Marca. Vino a España tres meses después y me hizo llegar el mensaje de que quería cumplir con su promesa.
Vendría al periódico tras una comida en la embajada argentina. La comida se alargó. Fue una tarde de espera muy larga, pero se preocupaba en hacerme llegar mensajes desde la embajada de que la visita seguía en pie. Finalmente llegó casi de noche al periódico. Visitó el taller y fue muy atento con todo el mundo. En la imagen de más abajo, le muestro la portada del día que fue campeón del mundo.
Por último, esta fotografía se hizo en 1987, cuando el Nápoles logró su primer Scudetto y viajé hasta allí para cubrir esa información. Estuve varias veces en Nápoles, me alojaba en un hotel muy cercano a su casa. Me daba largas muchas veces, pero siempre acababa cumpliendo. Nos ayudó mucho y hasta hacía gratis las promociones de los periódicos. Salí varias veces a cenar con él y otros jugadores por Nápoles.
Siempre que Maradona ha vuelto a España hemos mantenido una buena relación. Ha tenido muchos capítulos polémicos a lo largo de su vida, pero conmigo siempre cumplió con un trato cercano y profesional.