El AC Milan se impuso por 1-0 al Nápoles en la ida de los cuartos de final en la Liga de Campeones, gracias a un gol de Ismael Bennacer que ha exasperado a un rival sin puntería y que, además, ha acusado la expulsión de Zambo Anguissa cuando intentaba la remontada.
El líder italiano tropieza en Europa
Los aficionados del estadio Giuseppe Meazza fueron testigos de otro duelo con el equipo de moda en Italia, que tiene el título de la Serie A en el bolsillo pero que el pasado 2 de abril se había llevado un buen rapapolvo (0-4) precisamente contra el Milan en un duelo liguero.
Conscientes de ello, los pupilos de Luciano Spalletti amenazaron a los 51 segundos del pitido inicial. Khvicha Kvaratskhelia estrelló en la pierna de un defensa su disparo, que llevaba marchamo de gol, tras un mal entendimiento entre el portero Mike Maignan y su pareja de centrales.
Luego probó suerte Giovanni Di Lorenzo, con otro remate desviado en el área tras la salida de un saque de esquina. Era la tercera ocasión del cuadro napolitano en apenas tres minutos. La reacción del Milan llegó mediante una buena carrera de Rafael Leão, culminada con un lanzamiento con la bota izquierda demasiado cruzado.
La oportunidad del delantero portugués animó el partido y pronto eso se vio en el marcador, con la diana de Bennacer al borde del descanso. Después de un robo de pelota en el centro del campo, Brahim Díaz condujo la pelota hasta el balcón del área; cedió para Leão a su lado derecho, pero éste asistió a la banda opuesta para que Bennacer remachase el 1-0.
Con el oponente bastante noqueado, Simon Kjaer rozó el segundo para los 'rossoneri' en un córner que remató al travesaño. Entre el guardameta Alex Meret y el palo, el balón se marchó finalmente repeñlido; en cambio, metió el miedo en el cuerpo a un Nápoles que necesitaba el descanso urgentemente.
Segunda mitad más trabada
La segunda mitad fue más trabada, con el equipo napolitano encomendado a un Kvaratskhelia sin chispa. La sorprendente estrella del 'Calcio' estaba demasiado hilando jugadas ofensivas, careciendo de conexiones con Hirving Lozano o con Eljif Elmas, quien pese a todo mandó al larguero que puso a prueba a Maignan en el 56'.
El entrenador 'rossonero', Stefano Pioli, supo oxigenar a su equipo con cambios que ralentizaron el ritmo y evitaron que el Nápoles se envalentonase. Para colmo, los visitantes se quedaron con 10 jugadores sobre el césped tras la doble tarjeta amarilla a Zambo Anguissa en dos acciones casi seguidas, separadas tan solo por cuatro minutos.
Las sustituciones del Nápoles carburaron tarde y, aunque hubo otro susto para Maignan en la recta final, la portería local se quedó impoluta. Ventaja mínima para el Milan, que el próximo 18 de abril (21.00 horas) visitará el estadio Diego Armando Maradona con el reto de truncar la temporada de ensueño napolitana.