Marruecos ha terminado su participación en el Mundial de Qatar consiguiendo un más que meritorio cuarto puesto. Ni en sus mejores sueños se imaginaban los marroquíes que podrían llegar tan lejos en este Campeonato del Mundo cuando el torneo comenzó. Tras superar una fase de grupos en la que no partían como favoritos por la presencia de selecciones como Croacia o Bélgica, los de Regragui sorprendieron a todo el mundo avanzando en las eliminatorias.
Terminaron primeros de grupos encajando un solo gol en los primeros tres partidos. En octavos eliminaron a España en una agónica tanda de penaltis en la que su portero, Bono, se erigió como gran estrella. En cuartos de final se enfrentaron a una Portugal que venía asustando tras golear por 6-1 a Suiza en su eliminatoria anterior, pero un gol de En-Nesyri al final del primer tiempo metió a Marruecos en semifinales consiguiendo el mejor resultado de la historia de un equipo africano en los Mundiales.
Fue en la semifinal, contra Francia, cuando llegó la derrota y la eliminación. Los de Deschamps se impusieron por 2-0 con goles de Theo y Kolo Muani para conseguir su billete a la gran final y dejar a Marruecos con la miel en los labios. El destino ha querido que cerrarán el Mundial tal y como lo empezaron, ante Croacia, en un partido en el que se han impuesto los croatas por 2-1.
Los de Regragui han sido, sin lugar a dudas, la revelación del Mundial de Qatar con una columna vertebral en la que han destacado futbolistas conocidos como Bono, Achraf o Ziyech y otros más desconocidos como Ounahi o Amrabat.
Bono
El guardameta del Sevilla ha sido uno de los mejores porteros del torneo. Titular en seis de los siete partidos de su equipo, se perdió solo uno por una indisposición en los minutos previos al inicio del choque, ha sostenido a su país en momentos en los que más ha sufrido.
Fue clave en la tanda de penaltis de octavos de final ante España deteniendo los penaltis a Carlos Soler y Busquets y también apareció para salvar a los suyos en cuartos ante Portugal en una segunda parte en la que los lusos fueron con todo a por el empate.
Achraf Hakimi
Nacido en Getafe y canterano del Real Madrid. El lateral derecho del PSG es una estrella mundial y uno de los líderes de la selección marroquí. Sin tener ninguna actuación realmente destacada, Achraf ha llevado a los suyos a competir al más alto nivel hasta llegar a las semifinales.
Tras su paso por Borussia Dortmund e Inter de Milan, parece haber encontrado en París el sitio donde desarrollar su carrera.
Sofyan Amrabat
Uno de los jugadores del Mundial. El pivote de la Fiorentina ha dado un clínic de cómo debe jugar un mediocentro durante todo el torneo. Rápido en las coberturas, certero en el pase y acertadísimo en el robo. Incansable.
Azzedine Ounahi
La suya ha sido otra de las grandes actuaciones individuales del torneo. El centrocampista del Angers ha sorprendido a todos con su finura a la hora de jugar, romper líneas rivales y conectar con sus compañeros de ataque.
Ha llamado la atención de directores deportivos de todo el mundo. Incluso el propio Luis Enrique le destacó en la rueda de prensa posterior al partido de octavos de final ante España como el futbolista que más le había sorprendido. En el Angers, colista de la Ligue 1, ya se frotan las manos por las ofertas que puedan llegar durante el mercado de invierno.
Hakim Ziyech
Capitán general y gran estrella de Marruecos. El futbolista del Chelsea no ha sumado, quizás, las cifras de goles y asistencias esperadas, pero ha sido uno de los líderes de su selección. Volvió de la mano de Regragui tras un tiempo apartado para conseguir el mejor resultado de la historia de Marruecos en una Copa del Mundo.
Su temporada en Londres, donde no está ofreciendo su mejor versión desde su llegada, no está siendo brillante, pero quizás este torneo es el empujón que le hacía falta al marroquí para volver a ser el extremo que maravilló a Europa en el Ajax de 2019 que se quedó a las puertas de la final de la Champions.