El Barcelona dominó la primera mitad casi al completo del duelo de octavos de final de Liga de Campeones ante el Nápoles, pero no obtuvo recompensa pese a la insistencia del español Lamine Yamal y de las ocasiones del alemán Ilkay Gundogan y del polaco Robert Lewandoski.
Saltó mejor el equipo de Xavi Hernández al Diego Armando Maradona y sometió al Nápoles, especialmente en los primeros 20 minutos, cuando pudo adelantarse con las ocasiones de Gundogan y Lewandoski, desbaratadas por dos buenas manos del italiano Alex Meret bajo palos. Solo al final del primer acto, el Nápoles respondió al dominio blaugrana con posesión, aunque sin ocasiones claras.
Los de Xavi han salido en la segunda mitad para buscar el tanto. Se sabían superiores a un Nápoles que no encontraba su versión de la temporada pasada. En el minuto 60 un pase de Pedri por dentro ha encontrado a Lewandowski. Ha amagado el polaco en la frontal y sacado un disparo raso ajustado para batir a Meret.
Ya estaba hecho lo más complicado. Derribar el muro italiano y cosechar un gran resultado para la vuelta. Sin embargo, en el minuto 76, Iñigo Martínez ha medido mal un pase entre líneas. Oshimen, recién aterrizado de la Copa África, ha metido cuerpo para quedarse frente a Ter Stegen y definir con un disparo cruzado. El nigeriano igualaba el encuentro. Y ha podido ser peor porque Anguissa ha estado a punto de marcar el segundo de cabeza. El gol hizo desaparecer a los azulgrana.