UEFA-SUPERLIGA

El presidente de la UEFA vuelve a la carga contra la Superliga

Aleksander Ceferin asegura que no le importaría que Real Madrid, Barcelona y Juventus abandonaran la UEFA

Esther Rodríguez

Madrid | 10.09.2021 14:27

Ceferin, presidente de la UEFA
Ceferin, presidente de la UEFA | Reuters

Real Madrid, Barcelona y Juventus, los tres equipos que se mantienen firmes en su proyecto de la Superliga, vuelven a estar en la diana de Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA.

Ataque directo

En una entrevista en Der Spiegel, Ceferin abre la puerta de salida de la UEFA a los tres clubes. “No me importaría que se fueran, resulta muy divertido que quieran crear una nueva competición y el mismo tiempo quieran jugar esta temporada la Liga de Campeones”.

Pero no se ha quedado ahí el presidente del máximo órgano del fútbol europeo que ha cargado duramente contra los dirigentes de Madrid, Barça y Juve.

Directivos incompetentes

Ceferin califica de incompetentes a Florentino Pérez, Joan Laporta y Andrea Agnelli y les acusa de intentar “matar el fútbol”.

Para el presidente de UEFA tres de los más importantes clubes del mundo “tienen sencillamente directivos incompetentes”. “Esos tipos han intentado matar el fútbol”, añade en Der Spiegel.

El Real Madrid en la diana

Ceferin se muestra especialmente duro con el Real Madrid y con su presidente. En su opinión no tiene mucho sentido que Florentino Pérez diga “que el club solo puede sobrevivir con una Superliga y luego intente fichar a Kylian Mbappé por 180 millones de euros”.

Ceferin se siente amenazado

El presidente de UEFA asegura que recibió amenazas por parte de un asesor de la Superliga. Este individuo, cuyo nombre no ha desvelado, le habría sugerido que fuera la UEFA la encargada de organizar la nueva competición que en un principio fundaron 12 clubes y ahora solo sostienen Real Madrid, Barcelona y Juventus. Ante su negativa a respaldar el proyecto fue amenazado con una posible demanda.

Ceferin también planteó algunas reformas del Fair Play financiero en el que se impondría un pago obligatorio a los clubes que rebasen cierto límite en el gasto. Los ingresos de esos pagos deberían ser repartidos entre los otros clubes.

“En el futuro queremos hablar de un balance competitivo más que de fair play”, concluye el presidente de la UEFA.