El París Saint-Germain y el Chelsea alcanzaron este martes las semifinales de la Champions League pese a perder sus respectivos partidos ante el Bayern de Múnich y el Oporto en sus propios feudos, gracias a sus victorias a domicilio en los partidos de ida.
El conjunto parisino se cobró la revancha de la temporada pasada y eliminó al Bayern Múnich, vigente campeón de la Champions, pese a perder por 0-1 en el partido de vuelta de cuartos de final, una auténtica oda al fútbol por ocasiones, emoción y belleza. Choupo-Moting marcó para el cuadro bávaro.
El equipo de Mauricio Pochettino, que lleva cuatro meses en el banquillo francés, ya tiene su primer gran éxito alcanzando la penúltima ronda antes de la final en la competición de competiciones. No le hizo falta ganar al PSG, al que le valió el 2-3 de Múnich sin especular con su ventaja. El duelo fue extraordinariamente atractivo y permite a los galos estar entre los cuatro mejores de Europa por segunda temporada consecutiva.
El Chelsea alcanza las semis siete años después
El Chelsea, por su parte, certificó sin problemas su regreso entre los mejores de la Liga de Campeones tras clasificarse para las semifinales siete años después tras apear al Oporto, con el que perdió por 0-1 el duelo de vuelta, aunque encajó el golazo de Taremi ya en el minuto 93 y sin haber pasado grandes apuros.
La temporada 2013-2014 fue la última de la máxima competición continental que vio en la penúltima ronda al conjunto londinense, que había perdido parte del protagonismo que había llegado a tener y que le habían llevado a coronarse campeón en 2012.
Los Blues se verán las caras con el ganador de la eliminatoria entre el Real Madrid y el Liverpool, mientras que los parisinos esperan contendiente entre Borussia Dortmund y Manchester City. Los de Zidane defienden un 3-1 en Anfield mientras que los de Guardiola visitan Alemania con el 2-1 logrado en el encuentro ida.
