Sergio Ramos, uno de los capitanes del Sevilla, afirmó que su equipo tiene este miércoles "una oportunidad maravillosa y única" en el partido de la Liga de Campeones ante el PSV Eindhoven neerlandés, en el que "es vital conseguir la victoria" para tener opciones de pasar de ronda, por lo que consideró que "nada debe distraer del objetivo".
Expulsado en Donosti
El central del Sevilla no ha podido evitar referirse a lo ocurrido el domingo en el Reale Arena donde fue expulsado por el colegiado Ortiz Arias y su equipo perdió 2-1.
Para Ramos "cuando se equivocan los árbitros, como antiguamente, deberían ir a la nevera. Nosotros estamos para ayudarnos. En el caso del otro día el árbitro es una persona distante, si le preguntan ciertos jugadores habla con una prepotencia fuera de lugar siendo un árbitro, pues obviamente a nosotros no nos gusta."
Ramos continua explicando que "al final te encuentras opiniones, palabras que están fuera de lugar y porque tengas una posición de poder hacer lo que quieras, yo creo que debemos mantener siempre el máximo respeto a los árbitros como los árbitros a las jugadores", concluyó.
Pasar página
Ramos indicó este martes en rueda de prensa que "no es momento de mirar atrás" y que la Liga de Campeones "es una competición especial", por lo que espera que "salga mañana un partido perfecto para devolverle el cariño a la afición que siempre apoya".
"Hay que dar a la gente esa alegría que desde hace tiempo no se le ha dado", destacó el defensa de Camas (Sevilla), quien advirtió de que "el PSV es un gran rival" y "no es casualidad que haya ganado todos los partidos de su liga" en la temporada en curso.
Sergio Ramos pidió no centrarse demasiado en la figura de su delantero centro, el ex sevillista Luuk de Jong, ya que "hay que saber jugar contra el equipo, no saber jugar contra De Jong", aunque dijo que es "un jugador que va bien por alto" y "uno de los referentes" del conjunto de Eindhoven.
Es una final en la primera fase
"Es una final, es más que un partido de 'Champions' porque no tenemos margen de error. Esos pequeños detalles en esta competición sí marcan la diferencia. Ojalá seamos mañana todos uno, que el estadio sea un infierno y que el PSV sepa que no gana aquí cualquiera", aseveró.
El central sevillista aseguró que "desde la llegada del míster", el uruguayo Diego Alonso, el plantel está "entrenado bien, intentando mejorar", pero "hay veces en que juegas bien y pierdes", por lo que el Sevilla debe "cuidar esas circunstancias que marcan la diferencia", y reivindicó que "el equipo no gana, pero ha hecho muchas cosas bien".
Ahora, según Sergio Ramos, es el "momento para mirar para adelante y conseguir resultados", y en el que, por las dificultades, "el entrenador debe sentir" que los jugadores están "a muerte con él" porque "tiene un criterio de juego que puede beneficiar" al Sevilla.
Superar la mala racha con el apoyo de la afición
El cuarto capitán del plantel nervionense señaló que nota "el sentir de los aficionados" por la mala racha que atraviesa el Sevilla y aseguró que su mismo "padre es el primero que reclama que el equipo debe ganar", aunque aludió a la idiosincrasia de "una afición que cuando peor están, es cuando más unidos están los sevillistas".
"Más unidos somos más fuertes, son momentos en los que necesitamos más que nunca el apoyo de la gente", recalcó.