Hay historias de superación que hacen que uno se plantee los límites de lo posible y de lo no posible. Una de esas historias es la de Samuel, un joven chaval de 11 años que juega en el filial del Manchester United. Hast aquí quizá pueda parecer una historia normal, pero el niño está en una silla de ruedas. Aún así, es portero en las categorías inferiores de los 'red devils'.
Esta semana, Samuel ha recibido una visita muy especial que le ha emocionado. Que ha emocionado más bien a todos, pues los jugadores del Man U que han ido a verle también han sentido dicha emoción. "He conocido a Ibrahimovic y a Pogba. Ha sido increíble", dijo Sam. Y a David de Gea también, quien regaló unos guantes firmados al joven portero de los de Manchester: "Era lo mejor que todo lo que había tenido hasta ahora".
"Jugar al fútbol es un poco díficil, pero lo sigo intentando. Cuando jugamos uso mis rodillas para moverme o saltar. Pensaba que no podía jugar en el equipo, pero el entrenador me dio una oportunidad. Siempre me digo a mí mismo 'nunca te rindas", afirma Sam.